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La producción industrial decrece por vez primera en dos años

La producción de la industria española cayó en febrero un 1,6% respecto al mismo mes de 2000. Desde hace dos años no se registraba una tasa interanual negativa en este sector.

La teoría económica clásica suele utilizar los datos de coyuntura industrial como indicadores adelantados del futuro comportamiento de la economía. De esta forma suele haber una correlación entre las crisis del sector y la evolución de la economía uno o dos años más tarde.

Si se tiene en cuenta este análisis, los datos ofrecidos ayer por el Instituto Nacional de Estadística (INE) no pueden ser más desalentadores. El índice de producción industrial (IPI), que elabora este organismo, cayó en febrero un 3,5% en comparación con el mismo mes de 2000. Descontando los efectos del calendario laboral (el año pasado fue bisiesto), esta variación fue del -1,6%.

Habría que remontarse hasta febrero de 1999 para encontrar una tasa interanual negativa en este sector, en términos corregidos. Aun-que todavía es pronto para determinar el alcance (febrero es el primer mes en que se registran números rojos en el IPI), lo cierto es que el dato no es más que la continuación de una evolución descendente en la producción industrial iniciada a mediados del pasado ejercicio. De hecho, en agosto la producción crecía a ritmos del 6,6%, muy lejos de las tasas actuales. De todas formas, la evolución de la producción no es homogénea. Los bienes de equipo son los que mejor comportamiento están teniendo dentro de la atonía general, con una leve caída del 0,6% en febrero, corregidos los efectos del calendario.

No se puede decir lo mismo de los bienes intermedios (-1,7%) y mucho menos de los bienes de equipo. La producción de estos últimos, con una caída del 3,7% en tasa interanual empieza a ser preocupante.

Las actividades que registran mayores bajadas en lo que se lleva de año (enero y febrero, acumulados sobre el mismo periodo de 2000) son la madera (-14,8%), el refino de petróleo (-11,35), los instrumentos de precisión (-11,1%), los combustibles sólidos (-7,4%) y la maquinaria mecánica (-3,6%).

En cambio tienen un comportamiento claramente expansivo la producción de equipos informáticos (29,5%) y la industria del cuero (10,7%) y otras manufacturas (21%).

La producción industrial global, acumulada en los dos primeros meses de 2001, registró un leve crecimiento, del 0,5%. Habrá que estar atentos a los datos de los próximos meses para comprobar si ésta se recupera o es el inicio de una recesión en el sector como la registrada en los años 1993 y 1996.

 

Rato revisará en breve el cuadro macroeconómico

Desde el Ministerio de Economía se intentó ayer quitar hierro a los datos de producción industrial de febrero. El departamento que dirige Rodrigo Rato califica la evolución de "moderada flexión a la baja", si se tienen en cuenta los datos acumulados de los dos primeros meses del año.

Achaca esta tendencia al menor vigor de la demanda interna, "tras un largo periodo de expansión", así como a una "cierta pérdida de pulso" de las exportaciones que, "posiblemente comienzan a acusar la desaceleración del comercio mundial" y, en particular, del crecimiento económico de las economías europeas que constituyen el destino principal de las exportaciones españolas.

Precisamente ayer, Rodrigo Rato adelantó en Bilbao que el Gobierno no esperará mucho a revisar el cuadro macroeconómico previsto para este año. El vicepresidente económico indicó que esta revisión, a la baja, se producirá en breve, después de Semana Santa, y tendrá en cuenta la modificación de las previsiones de crecimiento de la zona euro realizadas por la Comisión Europea, el Fondo Monetario Internacional y la OCDE.

Economía había barajado en principio unas fechas más tardías para la revisión del cuadro macro, cercanas a la mitad de año, para tener más datos sobre la evolución de los ingresos y de la actividad productiva.

Rato señaló ayer que la economía española crecerá en 2001 "ligeramente" por debajo del 3,6% previsto en los Presupuestos Generales del Estado, aunque por encima de la media comunitaria, cuyo PIB se estima que crezca este año entre el 2,5% y el 3%.

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