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INTERNACIONAL

Toledo y García lucharán por una presidencia que reclama consenso

Alan García, con el 26% de los votos, dio la sorpresa y será el rival de Alejandro Toledo, que obtuvo el 36% de los votos, en la segunda vuelta de las elecciones presidenciales de Perú, que se celebrarán dentro de un mes. La dispersión del voto habido en las elecciones al Congreso y la penalización de los inversores al ascenso de García exigen la búsqueda de puntos de encuentro. El ganador Alejandro Toledo ya dio el primer paso con el "gesto" de felicitar a García por dejar fuera de la carrera a la candidata Lourdes Flores (23% de los votos).

La sorpresa en las elecciones a la presidencia de Perú es Alan García, que obtuvo el 26% de los votos en la primera vuelta y se convierte en un rival creíble para Alejandro Toledo, que consiguió el 36% de los votos.

García, de 51 años, presidió Perú entre 1985 y 1990 y dejó el país con una inflación superior al 7.000%, además de verse obligado a exiliarse en Colombia acusado de corrupción, por unos cargos que, al final, han prescrito.

No resulta extraño por consiguiente que los inversores penalizaran el resultado de ayer, con una fuerte caída del 5% de los bonos Brady, la referencia para el dinero extranjero, llevando la prima de riesgo del país a siete puntos completos por encima del bono estadounidense.

Este hecho, y el resultado electoral del Congreso, en el que el partido Perú Posible de Toledo alcanzó el 25% de los 120 escaños, y el Partido Aprista de García, el 20%, obligará a los candidatos a buscar puntos de encuentro.

Alejandro Toledo hizo el primer gesto al poco de conocer que Alan García sería su contrincante, con una felicitación directa y pública. "Tengo que felicitarle porque es lo que Perú espera de su democracia", subrayó Toledo, quien haría lo mismo más tarde con la candidata perdedora Lourdes Flores.

Aunque la mayor parte de los analistas consideran que los electores que votaron a Flores lo harán al Toledo en la segunda vuelta, algunos valoran que el tirón alcanzado por García puede durar y ser un rival de consideración de Toledo.

En cualquier caso, la previsible necesidad de alcanzar un mínimo consenso para sacar a Perú de la sima en la que está tras los desafueros cometidos por el huido a Japón ex presidente Alberto Fujimori y su lugarteniente, en paradero desconocido, Vladimiro Montesinos, se reflejaba ayer en declaraciones como la del analista político Ernesto Velit.

"El resultado habido es lo mejor que podía pasar. Fuerza a los partidos a trabajar juntos para conseguir sacar adelante la legislación. Exige el debate y la política de consenso", subrayó Velit a la agencia Reuters.

 

Reconocimiento de unas elecciones limpias

Otro aspecto a destacar de los comicios del domingo es la normalidad con que se desarrollaron, frente a las acusaciones de fraude y corrupción que envolvieron las elecciones de hace un año, en las que el ahora huido Alberto Fujimori derrotó a Toledo.

El director de la misión de la Organización de Estados Americanos (OEA), Patricio Chellew, declaró ayer a este diario que las elecciones del domingo fueron "un éxito democrático". Chellew reconoció que los locales de Perú Posible y Apra en la localidad de Ayacucho habían sufrido "pequeños atentados", pero que las votaciones se habían podido reanudar sin problemas. Chellew añadió que los observadores de la UE y de EE UU confirmaron la "transparencia del proceso electoral".

Algunos dirigentes de los partidos políticos comentaron a este diario sus impresiones sobre el resultado: "El triunfo de García ha sido su campaña de propuestas, como la de obligar a Telefónica a reducir sus tarifas y facilitar trabajo a los más pobres", afirmó Carlos Andrés de los Ríos, jefe de movilización del Apra.

Kurt Burneo, miembro del equipo económico de Perú Posible, señala que vio a Toledo "animado", pese a que la victoria ha sido insuficiente, ya que Toledo necesitaba superar el 50% de los votos para evitar la segunda vuelta. "Perú Posible parte con ventaja, porque tiene legitimidad internacional. Ahora hay que captar al 30% de votantes que no han optado ni por García ni por Toledo", añadió.

Javier Velarde, del equipo económico de UN, explica que el error de Flores fue hacer campaña contra García: "Parecía que le disputaba el segundo puesto". De todos modos, Velarde asegura que UN tendrá un papel clave en el Congreso, donde logrará unos 15 diputados.

Toledo y García aprovecharon ayer para descansar y estudiar la nueva estrategia. Se espera para hoy el resultado final de los comicios.

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