Fidalgo y Camps no renegociarán el acuerdo

El ex secretario general de UGT Nicolás Redondo lanzó un claro mensaje de reproche a la actitud de su sucesor al frente de este sindicato, Cándido Méndez, por su negativa a sumarse al pacto de pensiones que sí firmarán CC OO y CEOE con el Gobierno. Redondo señaló ayer que este acuerdo "no es negativo en términos generales para los trabajadores y pensionistas", aunque "sea perfectamente mejorable".

Es más, calificó el contenido del pacto de "bastante asumible", si bien matizó que tampoco es "para dar saltos de alegría ni para ser triunfalistas".

Asimismo se atrevió a decir lo que nadie en el mundo sindical ha reconocido públicamente hasta la fecha: que la unidad sindical con CC OO, "por mucho que se diga, se ha resentido y no es la que debe ser". Fue más pesimista aún cuando opinó que, a este respecto, se ha llegado a una situación que "cuesta superar".

Por su parte, todos los secretarios generales de federaciones y uniones regionales de UGT discutirán hoy con la ejecutiva del sindicato si se adhieren o no al pacto de las pensiones. Todo parece indicar que la ejecutiva de la central, reunida ayer, se inclina por no no firmar el acuerdo. En todo caso, la dirección de UGT pedirá que se modifique el texto del acuerdo para poder firmarlo. Previsiblemente estos cambios no se realizarán. El secretario general de CC OO, José María Fidalgo, aseguró ayer que sera "leal" al texto consensuado, y el secretario de Estado de Seguridad Social, Gerardo Camps, advirtió a UGT que no dará ningún trato de privilegio a esta central.