Álvarez Cascos impone cambios de última hora en las ofertas del AVE
Hoy se conocerá los nombres de los adjudicatarios de la construcción del AVE Madrid-Barcelona decididos por el Gobierno y Renfe. Las quinielas apuestan por un reparto entre los ofertantes, no sólo para el pedido de los trenes para velocidades de 350 kilómetros por hora, sino también para las lanzaderas y las unidades de doble ancho de vía, aunque estos dos últimos pedidos se decidirán más tarde. Fomento pidió la semana pasada a Alstom, Talgo y Siemens que le remitieran nuevas ofertas de precio para suministrar entre 10 y 20 unidades, frente a la horquilla de 26 a 40 solicitada en las bases del concurso, lo que refuerza la tesis de que habrá reparto.
Durante toda la jornada de ayer se cruzaron informaciones contradictorias sobre la forma y el resultado de la adjudicación, prevista para hoy mismo, del suministro de los trenes de alta velocidad par el AVE de Madrid a Barcelona.
En medio del más rotundo silencio por parte de los protagonistas del proceso, Gobierno, Renfe y fabricantes de trenes, y de las especulaciones del resto de los estamentos del sector ferroviario, una sola idea parecía abrirse camino con claridad: la decisión tendrá un fuerte componente salomónico, y habrá reparto.
Para apuntalar aún más esta idea, este diario ha podido saber que el ministerio de Fomento pidió, por lo menos a dos de las tres empresas concursantes, una nueva oferta de precio. En los pliegos originales del concurso se dejaba libertad a los licitantes para ofrecer precio por la fabricación de un número de trenes AVE para velocidades de 350 kilómetros a la hora que oscilaban entre 26 y 40 unidades, con un precio de referencia de 110.000 millones de pesetas.
En la nueva "minioferta" exigida la pasada semana por Fomento debían ofrecer un nuevo precio, pero ahora sólo para una horquilla entre 10 y 20 trenes. Esta petición hace crecer la creencia de que el Gobierno ha consolidado su intención de repartir el pedido entre dos o los tres ofertantes. Además, Renfe ha decidido reservarse gran parte de las tareas de mantenimiento de los trenes.
Confusión
Durante toda la jornada de ayer la confusión entre las fuentes habituales del sector ferroviario era máxima. En primer término, había opiniones encontradas sobre quién tomará la decisión final. La mayoría seguía apostando porque Fomento ya tiene su veredicto y ahora el consejo de Renfe refrendará lo decidido por Francisco Álvarez Cascos.
El trajín que se detectaba ayer entre los ofertantes y la compañía ferroviaria hizo crecer la impresión de que el Gobierno ha dictado una decisión genérica de reparto, pero ha pedido a Renfe que ultime los detalles de la distribución. Esta tesis alimentó también las especulaciones sobre los pedidos objeto de reparto. Esta mañana el consejo de Renfe sólo tiene previsto adjudicar el contrato para los trenes de 350 kilómetros por hora. No obstante, en el sector se barajaba la posibilidad de que el esquema de reparto incluyera también las adjudicaciones del los trenes lanzaderas (seis unidades con opción hasta 24, capaces de alcanzar los 250 kilómetros a la hora) y las composiciones para distinto ancho de vía (ocho unidades). Algunas fuentes iban más allá y aseguraban que la distribución de los pedidos incluirá las previsiones de compra de material ferroviario anunciadas por Cascos para el periodo 2000-2007.
Sobre la fórmula del reparto, las opiniones van desde quienes aseguran que los adjudicatarios construirán cada uno su tren, y quienes afirman que Renfe no puede aceptar una fórmula que le complicaría la explotación de la línea y el mantenimiento del material. Para ellos se terminará imponiendo la construcción de un tren único para cada tipo de explotación en la que colaborarán los adjudicatarios, uno de ellos en calidad de coordinador del proyecto.
Varias tecnologías
Las fuentes que apuestan por que el reparto implicará la construcción de trenes distintos por cada fabricante aseguran que el ministerio es favorable a esta fórmula, ya que permite instalar en España el concepto de interoperabilidad; esto es, que haya trenes de distintas tecnologías (y en el futuro de distintos operadores) en una misma línea.
Un aspecto importante en el esquema final es el papel que jugará la empresa vasca CAF. Al parecer el Gobierno acepta que pueda construir una o dos unidades de su prototipo de doble ancho, igual que también se va a dar oportunidad a Talgo para fabricar su nuevo material.
Los sindicatos condicionan su voto en el consejo
Los representantes de CC OO y UGT de Renfe condicionan su voto sobre la adjudicación del contrato de compra y mantenimiento de los trenes AVE a Barcelona, en el consejo extraordinario que se celebrará hoy, a que se garantice que el personal de la compañía participe en parte de dicho mantenimiento y, por lo tanto, se realice en los talleres de la compañía ferroviaria, informaron a Europa Press en fuentes sindicales.
Los sindicatos consideran imprescindible la participación de la plantilla de 5.000 trabajadores que componen la unidad de mantenimiento integral de trenes de la compañía en los trabajos de reparación del nuevo material, con el fin de que puedan adquirir conocimientos en tecnología de Alta Velocidad y no quedar relegados a atender los trabajos que requieren los trenes convencionales.
A la hora de emitir su voto, las centrales valorarán también si el contrato se reparte entre las empresas concurrentes, "para evitar el monopolio de la producción de esta parte de su fabricación que se lleve a cabo en España" , según detallaron las mismas fuentes.
Renfe celebrará un consejo de administración extraordinario con el objeto de estudiar y, en su caso, aprobar la propuesta de adjudicación del contrato de suministro de los trenes del AVE a Barcelona recibida del Gobierno, que ha recogido previamente los informes técnicos y económicos de la Comisión de Evaluación de Ofertas, que componen representantes del Ministerio de Fomento y de la compañía ferroviaria.
Aprobados tres tramos de la línea entre Córdoba y Málaga
El Consejo de Ministros autorizó ayer la celebración del contrato de obras de plataforma de tres tramos de la nueva línea de alta velocidad Córdoba-Málaga, que suman más de 31 kilómetros y tienen un presupuesto total de licitación de 24.770 millones de pesetas.
Las obras autorizadas suponen la construcción de la plataforma en los tramos Almodóvar del Río-Guadalcázar, Guadalcázar-Fuente Palmera, y Herrera-La Roda de Andalucía, todas con un diseño de vía doble de ancho internacional, apto para velocidades de 350 kilómetros por hora, informó el Ministerio de Fomento.
Incluyen movimientos de tierra, estructuras, reposición de los servicios y servidumbres afectados, y la construcción de conexiones transversales que aseguran la permeabilidad viaria de la línea, además de las correspondientes obras de drenaje.
Tramos
El primero de los tramos (Almodóvar del Río-Guadalcázar) constituye el inicio de la nueva línea, que tiene su origen en la actual del AVE Madrid-Sevilla. Tiene una longitud de 6,3 kilómetros, un presupuesto de licitación de 9.858 millones y un plazo de ejecución de 24 meses.
Discurre por los términos municipales de Almodóvar del Río y Guadalcázar, en la provincia de Córdoba, e incluye un viaducto con una longitud de 860 metros sobre el río Guadalquivir y de las dos estructuras de conexión con la línea de alta velocidad Madrid-Sevilla.
El tramo Guadalcázar-Fuente Palmera tiene una longitud de 8,4 kilómetros y discurre por los términos municipales de Guadalcázar, Almodóvar y Fuente Palmera, también en la provincia Córdoba. Su presupuesto es de 7.480 millones y su plazo de ejecución es de 24 meses.
El último de los tramos, Herrera-La Roda de Andalucía, es de 16,6 kilómetros y discurre por Herrera, Casariche, Estepa, Lora de Estepa y La Roda de Andalucía, todos en Sevilla, y Puente Genil en Córdoba. Incluirá la construcción de la infraestructura para la estación de Puente Genil.