CiU consigue que Matas incluya un estudio integral del delta del Ebro
El Plan Hidrológico Nacional pasó ayer su primer trámite parlamentario, al rechazar el Pleno del Congreso las siete enmiendas a la totalidad presentadas por PSOE, IU y Grupo Mixto al proyecto de ley. Gobierno y CiU pactaron incluir en el texto un plan integral del delta del Ebro y el estudio de otros trasvases.
El ministro de Medio Ambiente, Jaume Ma-tas, arrancó ayer un acuerdo de última hora con CiU sobre el proyecto de Ley de Plan Hidrológico Nacional (PHN). Después de seis horas de debate, de gran expectación, los nacionalistas catalanes se sumaron al PP y Coalición Canaria, rechazando en el Pleno del Congreso las siete enmiendas a la totalidad presentadas por PSOE, IU, BNG, Esquerra Republicana (ERC), Iniciativa per Catalunya (IC), Partido Andalucista y la Chunta Aragonesista (CHA).
A cambio, Matas se comprometió a incluir a lo largo del trámite parlamentario dos enmiendas de CiU para que se incorpore al PHN un plan integral del delta del Ebro y su zona de influencia, y el estudio de "escenarios de futuro" sobre alternativas a los trasvases, incluso la posibilidad de trasvasar aguas procedentes de otras cuencas, como la del río Ródano.
Matas puso este acuerdo como ejemplo del consenso que el Gobierno está dispues-to a lograr en los próximos días, animando a Aragón a sumarse a las negociaciones. El ministro advirtió que hay tres condiciones "innegociables": el trasvase de 1.050 hectómetros cúbicos del río Ebro para atender las necesidades del arco mediterráneo, no pagar por el agua trasvasada y la preservación medioambiental del delta del Ebro.
El PHN contempla una inversión total de 3,8 billones de pesetas en ocho años, de los que 700.000 millones corresponderán al trasvase del río Ebro.
A pesar del acuerdo anunciado ayer, el portavoz de CiU, Xavier Trias, intentó desmarcarse de las tesis del Gobierno. Trias consideró que el rechazo a las enmiendas a la totalidad no presupone en la práctica que su partido haya aceptado el plan hidrológico de Matas. "El planteamiento del ministro de hoy es positivo por la posibilidad de que puedan intervenir otras cuencas en los trasvases, pero hay que seguir mejorando el plan mediante enmiendas si el Gobierno quiere nuestro apoyo en la votación final", dijo.
Los nacionalistas catalanes insisten en que el Gobierno reduzca de 1.050 a 600 hectómetros cúbicos por año el volumen hídrico a trasvasar desde el Ebro, de los que 200 hectómetros se extraerían del tramo final del Ebro, y los restantes 400 hectómetros, de los canales de los regantes del delta.