Bruselas obliga a Deutsche Post a segregar su negocio de paquetería
Deutsche Post deberá crear una nueva empresa independiente de la matriz para atender su negocio de paquetería. La Comisión Europea cree que sólo así se evitarán los subsidios cruzados desde el servicio universal reservado al monopolio postal alemán hacia áreas comerciales abiertas a la competencia. Además, Bruselas ha impuesto a la empresa una multa de 24 millones de euros por abuso de posición dominante.
El comisario europeo de Competencia, Mario Monti, mostraba ayer su regocijo ante la conclusión de un expediente que le ha permitido fijar, por primera vez, "unas normas claras sobre los subsidios cruzados que deberán respetar los monopolios postales que compiten en ámbitos comerciales". El comisario concluyó ayer una investigación de más de siete años sobre la actividad del monopolio alemán dictaminando que "el operador ha abusado de su posición dominante al ofrecer primas de fidelidad y precios por debajo de costes en el servicio de paquetería". La investigación se inició tras una denuncia de la multinacional de logística UPS.
Deutsche Post deberá ahora subcontratar sus servicios de paquetería y su filial tendrá que competir por la adjudicación en igualdad de condiciones con el resto de empresas del sector.
La propia empresa alemana, que ahora ya cotiza en los mercados bursátiles, ofreció esta solución que, "de todos modos, la Comisión habría impuesto al final", aseguran fuentes del departamento de Monti.
Esas mismas fuentes reconocen que la decisión adoptada ayer "va un paso más allá que la ley comunitaria sobre transparencia financiera de las empresas públicas". Ese texto legal obliga a todos los antiguos monopolios (sean televisiones, operadores postales o compañías eléctricas) a aplicar una contabilidad analítica que permita diferenciar entre la financiación del servicio público (que las autoridades pueden subvencionar) de la puramente comercial (donde deben competir en igualdad de condiciones).
Para garantizar esa separación contable, Monti ha considerado imprescindible esta vez la creación de una empresa de paquetería al margen de la matriz, "como garantía de que el monopolio de las cartas no se utilizará para financiar otro tipo de servicios".
La Comisión afirma que, durante más de cinco años, los consumidores alemanes subvencionaron sin saberlo la agresiva política comercial de Deutsche Post en el sector de paquetería. La empresa alemana, como casi todos los antiguos monopolios postales de la UE, tiene reservado por ley los envíos de más de 350 gramos o cuyo franqueo supere cinco veces la tarifa más barata.
El sello de un marco y pico (unas 100 pesetas) en cada carta costeaba en parte la actividad comercial. La empresa alemana utilizó este privilegio, concedido por mor del servicio universal, para ofrecer servicios de paquetería a costes "predatorios", es decir, sin cubrir siquiera gastos, de acuerdo con Monti. La operadora impidió además, según Bruselas, la entrada de ningún competidor en el lucrativo mercado de logística de las ventas a domicilio, donde el monopolio se permitió ofrecer desde 1974 hasta el año pasado primas de fidelidad que impedían la entrada de ningún competidor. La CE ha impuesto por ello una multa de 24 millones de euros.