Trabajo aprueba el despido de 796 empleados de Sintel, el 44% del total

La Dirección General de Trabajo aprobó ayer "por causas económicas" el expediente de extinción de empleo de Sintel, que afecta a 796 trabajadores de los 1.818 que tiene. La plantilla recurrirá esta resolución, ampliará las protestas y exigirá al Gobierno una mesa de negociación.

Los trabajadores de Sintel, acampados desde hace casi dos meses en el Paseo de la Castellana de Madrid, se despertaron ayer con la aprobación de la Dirección General de Trabajo del expediente de extinción de empleo. æpermil;ste afectará a 796 trabajadores de los 1.818 que tiene, es decir, al 44% de la plantilla, y a 51 centros laborales. La empresa, en suspensión de pagos desde junio y adquirida recientemente por Carlos Gila, había solicitado el despido del 66% de la plantilla, es decir, de 1.201 empleados.

El organismo del Ministerio de Trabajo fundamenta su decisión en razones de carácter "económico, organizativo y productivo" y "en los datos presentados por los interventores judiciales y la inspección de trabajo". El 31 de octubre de 2000, las deudas de la compañía sumaban 11.000 millones de pesetas, y los gastos de explotación, 20.400 millones, cifra que duplicaba sus ingresos (11.968 millones de pesetas), recoge el comunicado de Trabajo. Las ventas en los tres años anteriores a 2000 fueron de 29.000 millones de pesetas anuales.

Tanto la dirección de la compañía como el ministro de Trabajo, Juan Carlos Aparicio, alegan que "sin la supresión de estos puestos de trabajo, Sintel estaría abocada a la quiebra".

Sin embargo, los trabajadores de Sintel, en plena movilización callejera, no aceptan este dictamen, que consideran un "acto de prevaricación". De momento, el estudio jurídico de CC OO está planteándose recurrirlo en el plazo de un mes. Los sindicatos entienden que esta decisión "contempla algunas cuestiones que no se corresponden con la realidad". De hecho -señalan- "la empresa no ha manifestado en ningún momento interés de negociar con la representación legal de los trabajadores ni se vislumbra una salida clara de un socio industrial que dé viabilidad a la compañía".

Los trabajadores, además, exigen al Gobierno "que intervenga en el conflicto y que constituya una mesa de negociación en la que participen Telefónica, el administrador de Sintel, sindicatos y el propio Ejecutivo".

El nuevo propietario de la empresa, Carlos Gila, considera que "la resolución de Trabajo es una medida ineludible para salvaguardar el resto del empleo que depende de la actividad de la compañía y, aunque esta resolución no es suficiente", -advierte- "obligará a un mayor esfuerzo negociador entre las partes que permita su viabilidad mediante una mayor carga de trabajo, capitalización e ingresos". Gila sostiene que este dictamen "es sólo una aprobación parcial del expediente".

Protestas hasta mayo

La plantilla, por su parte, acordó ayer con los sindicatos (CC OO y UGT) ampliar hasta mayo el plazo de protestas que mantiene en Madrid (Paseo de la Castellana y Catedral de la Almudena).

Sintel fue vendida por Telefónica en 1996 al grupo anticastrista MasTec. Los trabajadores acusan a este grupo de no haber pagado todo el importe de la operación y de haber "descapitalizado" la compañía durante su gestión. Desde entonces, Sintel fue de mal en peor. Ahora la situación financiera es crítica. Cuenta con un pasivo de 22.080 millones y unas pérdidas acumuladas desde junio de 10.000 millones.

La situación económica de Sintel

(En millones de pesetas)

Datos (octubre 2000):

Ingresos: 11.986

Resultado de explotación:

8.500

Gastos de explotación: 20.400

Balance (junio 2000)

Pasivo exigible: 22.080

Activo: 12.202

Déficit patrimonial: 9.877

Pérdidas netas desde junio hasta hoy: 10.000 millones

Plantilla: 1.818 trabajadores