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España reclama a la UE ayudas directas para los ganaderos afectados

El titular de Agricultura, Miguel Arias Cañete, acudió ayer al Consejo de Ministros de Agricultura de la UE con el propósito de reclamar ayudas directas para los ganaderos perjudicados por la crisis de la encefalopatía espongiforme bovina. Cañete no duda en reclamar la revisión del techo financiero de la UE para el periodo 2000-2006, lo cual está llamado a soliviantar a los contribuyentes netos de la UE, como Alemania u Holanda.

España no se encuentra sola en su petición, según aseguró Miguel Arias Cañete a su llegada a un Consejo cuyo punto principal de la agenda no era otro que las medidas para incentivar la reducción de la cabaña y disminuir así, a medio plazo, el impacto de la llamada enfermedad de las vacas locas en el sector ganadero y, por ende, en el presupuesto comunitario.

Si la mayoría de los ministros coincidía en que las propuestas del comisario de Agricultura, Franz Fischler, para apoyar al sector "no van suficientemente lejos", pocos parecían dispuestos a hacer un llamamiento a las ayudas directas al ganadero. Y mu-cho menos, a que sean cofinanciadas por el presupuesto comunitario, lo cual obligaría con casi total certeza a revisar la llamada Agenda 2000, o presupuestos para un sexenio que la UE selló tras un gran esfuerzo de negociación en Berlín.

Cañete admite que "no hay más dinero dentro de las actuales perspectivas financieras", pero el ministro sabe, fruto probable de su pasado como europarlamentario, que "las perspectivas financieras llevan mecanismos de modificación en los reglamentos de disciplina presupuestaria y, por tanto, España defiende que esta es una de las ocasiones en que procede revisar las perspectivas".

La Comisión Europea y, sobre todo los países contribuyentes netos (aquellos que reciben menos dinero comunitario del que aportan) se niegan, de momento, a tal posibilidad y no falta quien plantee, incluso, una renacionalización del coste que acarree combatir la crisis alimentaria. El comisario Fischler se limitó a defender ayer su "propuesta especial de destrucción", que prolonga la cofinanciación (70% procedente del presupuesto comunitario) de la compra de reses mayores de 30 meses más allá del 30 de junio y la extiende incluso a los animales de esa edad que sean aptos para el consumo humano. En este caso, Fischler es partidario de autorizar el almacenamiento de la carne para resolver "los problemas éticos" que la destrucción ha planteado en países como Alemania.

 

Los Quince pactan vigilar la cabaña ovina

Los ministros de Agricultura de la Unión Europea (UE) hicieron ayer suyo un reciente dictamen de los científicos comunitarios que no descarta la posibilidad de transmisión de la enfermedad de las vacas locas a los ovinos.

El Consejo de Ministros de Agricultura adoptó un proyecto de conclusiones de la presidencia sueca, que recoge prácticamente las medidas propugnadas recientemente por el Comité Científico Director de la UE, máximo órgano consultivo en materia de encefalopatía espongiforme bovina (EEB).

Los Quince destacaron la necesidad de reforzar las medidas de vigilancia y control sobre la cabaña ovina y caprina.

Pidieron a la Comisión que elabore un programa de vigilancia de la "tembladera" (encefalopatía propia de esas especies que no tiene repercusiones para el hombre) y que refuerce la investigación para desarrollar un test capaz de distinguir esa enfermedad de la presencia de EEB en ovinos y caprinos.

 

Badiola prevé la detección de tres a siete casos por semana en España

El director del Centro Nacional de Referencia de las Encefalopatías Espongiformes Bovinas (EEB), Juan José Badiola, estimó ayer que, a partir de ahora, se confirmarán en España de tres a siete casos semanales de animales afectados con el mal de las vacas locas.

Badiola hizo esta afirmación en las primeras jornadas científico-técnicas sobre este tipo de enfermedades, organizadas por la Facultad de Veterinaria de la Universidad de Zaragoza.

Badiola destacó que España se encuentra en la misma situación que otros países europeos y agregó que "cuantos más análisis de animales se vayan realizando, más casos de vacas locas aparecerán".

La confirmación de nuevos casos está ligada a la adecuada eliminación de los materiales específicos de riesgo (MER), apuntó Badiola.

Por otra parte, la Guardia Civil halló ayer otras 16 vacas muertas, esta vez en la finca La Tapana, en Tarifa (Cá-diz).

Los animales están siendo investigados por las autoridades sanitarias. Las investigaciones se extienden también por todo el territorio comunitario.

Ayer, una clínica de ginecología de la Universidad de Innsbruck, en Austria, se ofreció para analizar la leche de mujeres que hayan sido madres recientemente, a pesar de que no se ha descrito que la enfermedad se transmita por esta vía.

 

Cerca de 2.500 ganaderos protestan en Bruselas por la situación del sector

Entre 2.000 y 2.500 personas, según la policía, participaron ayer una manifestación en los alrededores de las instituciones de la UE en Bruselas para reclamar un mayor apoyo del mercado de carne de vacuno. La protesta se celebró horas antes de la reunión del Consejo de Ministros de Agricultura de los Quince, en el que estaba previsto debatir medidas de saneamiento del sector.

La manifestación provocó un bloqueo de todo el barrio europeo de la capital belga, ya que la policía respondió a la convocatoria bloqueando los accesos con alambradas y decenas de vehículos. La gendarmería vigilaba también las calles con helicópteros.

Según explicaron a Efe testigos presenciales, la policía trató de dispersar a los concentrados con cañones de agua. Sin embargo, los ganaderos respondieron con el lanzamiento de huevos.

Las fuerzas del orden interrumpieron también una marcha de aproximadamente un millar de tractores concentrados en la avenida de Tervueren, uno de los accesos a la zona de las instituciones comunitarias.

 

Agricultura inmoviliza 540 cerdos por sospecha de fiebre aftosa

El Ministerio de Agricultura y la Junta de Castilla y León han decidido sacrificar, como medida cautelar, 545 cerdos importados del Reino Unido (país que sufre la enfermedad) y que habían sido inmovilizados en una granja de la provincia de Burgos.

Los animales, tres partidas de 400, 115 y 25 cerdos, fueron "detectados, aislados y sometidos a análisis serológicos para determinar si estaban incubando la enfermedad", afirma una nota del ministerio distribuida ayer en Bruselas.

Los análisis realizados a los animales importados no están concluidos y, "ante la evidencia de que sería precisa una segunda toma de muestras la semana que viene", el ministerio y la Junta han decidido sacrificar "cautelarmente" los animales.

El departamento que dirige Arias Cañete facilitó ayer los datos sobre importaciones de ganado procedentes del Reino Unido desde el 1 de diciembre, fecha en la que comienza el periodo establecido por la UE para el control de la fiebre aftosa.

Desde esa fecha se han importado también dos partidas de 750 y 770 animales de especie ovina, con destino a Teruel, que fueron sacrificados, y "pasaron sin novedad los análisis de salubridad en el matadero". Otras dos partidas de cuatro y dos ejemplares de porcino, con destino a estudios científicos en A Coruña, han sido ya sacrificados.

Más países

Arias Cañete destacó que España tiene intención de hacer un rastreo no sólo de las importaciones directas realizadas del Reino Unido, sino también de las "indirectas", efectuadas a través de otros clientes de este país, como Holanda o Alemania. El ministro destacó la necesidad de que "la enfermedad sea afrontada desde el ámbito comunitario".

Por su parte, el Gobierno británico confirmó dos nuevos brotes de fiebre aftosa y manifestó su temor de que la enfermedad, altamente con-tagiosa entre vacas, cerdos, cabras y ovejas, se haya extendido al continente.

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