La Iglesia no se suma al pacto contra ETA porque es de naturaleza política
La naturaleza política del acuerdo antiterrorista firmado en diciembre por el PP y el PSOE es, según la Conferencia Episcopal, una de las razones que han llevado a la Iglesia a descartar su firma.
La Conferencia Episcopal no se sumará al acuerdo antiterrorista firmado en diciembre por el PP, el PSOE y el Gobierno, según anunció ayer su portavoz, Juan José Asenjo, quien precisó que, de todas formas, ninguno de los firmantes había pedido oficialmente su adhesión. Antes de este anuncio, el obispo emérito de San Sebastián, José María Setién, advirtió que, en caso de que la Conferencia Episcopal firmase el acuerdo, los obispos vascos no lo harían.
"La propuesta de adhesión a ese pacto en ningún momento ha llegado a la Conferencia Episcopal Española". Así de rotundo negó monseñor Asenjo que se hayan producido contactos entre los firmantes del acuerdo antiterrorista y la Iglesia.
A pesar de que no ha llegado esa propuesta, según explicó, la Iglesia, que ya debatió sobre ello en enero, no se sumaría de ningún modo al pacto. "Nuestro parecer es que la Iglesia no debe firmar semejante pacto ni debe comparecer en un foro donde, de alguna forma, se visibilizara la adhesión".
Asenjo fue aún más lejos, y precisó que "la Iglesia preferiría no ser invitada" a formar parte del acuerdo contra ETA, ya que no podría ser "un sumando más, no habría homogeneidad entre los sumandos". Este hecho, según explicó, es una de las principales razones por las que la Conferencia Episcopal no podría adherirse al acuerdo.
"Queremos distinguir muy claramente la naturaleza de las instituciones que firman, que son partidos políticos, y la naturaleza propia de la Iglesia, que es una institución de carácter religioso, de carácter pastoral", añadió Asenjo.
El portavoz del PP, Rafael Hernando, consideró que en la decisión de la Conferencia han pesado, sobre todo, "las amenazas de Setién". El secretario general del PSOE, José Luis Rodríguez Zapatero, aseguró que no se "entrometerá en las discrepancias internas de la Iglesia", a la que animó a "recuperar el tiempo perdido".
El PNV consideró "razonable" la postura de la Iglesia porque su tarea es "marcar preceptos morales y no propiciar la exclusión de los partidos democráticos". IU también respaldó la decisión de la Conferencia Episcopal.
Manifiesto de los rectores por la libertad
La Conferencia de Rectores de las Universidades Españolas firmaron ayer en el campus de Leioa (Vizcaya) una declaración en defensa de la libertad en la que se considera "igual de inhumana e incomprensible" que el propio ejercicio de la violencia la actitud de quienes "aplauden tales acciones violentas o miran hacia otro lado, como si no fuera con ellos el sufrimiento que éstas causan".
Al término del acto, que reunió a rectores de 52 universidades españolas, se registraron incidentes protagonizados dentro y fuera del recinto universitario por grupos radicales, que fueron reprimidos por agentes de la Ertzaintza.
En la firma de la declaración estuvo presente el lehendakari, Juan José Ibarretxe, así como representantes de los principales partidos democráticos.