El creador de Arrakis reclama 400 millones a British Telecom
Luis Torrado, ex presidente y fundador de Arrakis, una proveedora sevillana de Internet ahora en manos de British Telecom (BT), ha decidido reclamar 400 millones de pesetas a la firma británica por la vía del arbitraje. BT le compró la empresa en 1999 por 2.200 millones de pesetas. La reclamación podría tener que ver con el cese de Torrado como director general de Arrakis tras la absorción.
Luis Torrado, de 34 años, vendió en 1999 por 2.200 millones a British Telecom, una empresa de Internet que había fundado tres años antes en un piso de Sevilla y a la que llamó Arrakis, en honor al nombre que recibe un planeta imaginario de una novela de ciencia ficción. Dos años después está a punto de resolverse por laudo arbitral una reclamación de 400 millones de pesetas contra la multinacional británica de telecomunicaciones. El procedimiento arbitral fue pactado por ambas partes en el contrato de compraventa de Arrakis.
La reclamación, dirigida por el despacho Garrigues & Andersen, podría tener que ver con el presunto impago de la firma británica de parte de las cantidades acordadas en el contrato de compraventa o bien con el cese fulminante de Torrado como director general de Arrakis tras la integración en BT, según fuentes jurídicas.
En tres años (entre la puesta en marcha de Arrakis en 1996 y su venta en 1999), Torrado convirtió su modesto negocio de proveedor de acceso a la Red en el líder español en número de usuarios, con casi 100.000 abonados, una lista de clientes que pronto codiciaron tres gigantes de las telecomunicaciones: Telefónica, British Telecom y France Télécom.
Tras dos años de negociaciones con Telefónica, el acuerdo de venta se firmó en enero de 1999, pero con British Telecom, compañía que ha convertido el nombre de Arrakis y la sede sevillana en su división de Internet para España.
Torrado fue nombrado por BT director general de esta división, con la misión de seguir haciendo para la multinacional lo mismo que hacía como empresario independiente: ganar clientes y dinero. Cinco meses después fue destituido de su cargo, junto con los otros tres socios fundadores de Arrakis en medio una gran polémica. Según fuentes cercanas a Arrakis, el directivo se vio en medio de una pugna de poder entre directivos en España de BT, que ya se habrían enfrentado entre sí a causa de la aventura de comprar Arrakis.
Salida turbulenta
La salida física de Torrado del que había sido su despacho de presidente de Arrakis fue tormentosa, según testigos presenciales, y supuso la toma de poder del director general de la división multimedia de BT, Luis Álvarez, quien nombró como nuevo director general de Arrakis a Juan José Azcue. La compra de Arrakis en 1999 terminó con la era de las pequeñas empresas proveedoras de Internet en España.
La presión de las grandes compañías por fundar sus divisiones de Internet y poner en marcha portales en la Red culminó con la venta de todas ellas.
La presión llegó a ser tan fuerte que las cuatro últimas que quedaban independientes, incluida Arrakis, denun-ciaron en 1998 ante la recién creada Comisión del Mercado de Telecomunicaciones (CMT) a Telefónica por supuestas prácticas irregulares en sus relaciones como clientes. La CMT aconsejó a las empresas unirse en una asociación del sector. No les dio tiempo. Una tras otra fueron sucumbiendo a las ofertas de las multinacionales.