La Administración con las cuentas más saneadas
Los ayuntamientos, con su propio modelo de financiación, son el primer frente de servicio al ciudadano
Las entidades locales constituyen el tercer órgano de gobierno reconocido por la Constitución, tras el Gobierno central y las comunidades autónomas, aunque, sin embargo, son la Administración más cercana al ciudadano, especialmente en aquellas localidades de menor población. Los primeros servicios derivan principalmente de los respectivos ayuntamientos, o bien de las diputaciones y los consejos o cabildos insulares.
El 61,2 % de los ingresos de los ayuntamientos se cubren con impuestos municipales propios
La municipalidad en España está compuesta por 8.131 municipios y su suficiencia financiera está garantizada en la Ley Reguladora de las Haciendas Locales, que constituye la base del sistema de financiación local. Una de las características más destacadas de las corporaciones locales es que son la Administración de gobierno que se encuentra en mejor situación financiera. Al cierre de 2022 su deuda alcanzaba los 23.000 millones de euros, el 1,7% del PIB. Para poner en contexto este dato, basta decir que el conjunto de la deuda pública cerró el pasado año en el 113,2% del PIB, 1,5 billones.
El IBI representa el 65,2 % de las ganancias, y es el tributo municipal por excelencia
Los ayuntamientos cuentan con capacidad normativa para generar nuevos impuestos y pueden subir o bajar los tipos impositivos de sus tributos propios, así como fijar beneficios fiscales con el fin de alcanzar una mayor corresponsabilidad fiscal municipal. Estos tributos locales representan el 61,2% de sus ingresos totales, y el de mayor recaudación es el impuesto sobre bienes inmuebles (IBI), que llega a suponer el 65,2% de sus ganancias fiscales.
Las tasas son la segunda figura tributaria por importancia de recaudación, mientras que la tercera es el impuesto de circulación. El resto de los tributos propios lo componen el impuesto de plusvalías y el de obras y construcciones.
Las grandes cifras de la municipalidad española
Los últimos datos cerrados de 2020 ponen de relieve cómo de un total de gastos no financieros de 71.510 millones de euros, el 67,7% correspondió al desembolso de los ayuntamientos; el 29%, a las diputaciones, y el 2,5%, a los cabildos.
De los 29.076 millones de euros de recaudación de los municipios, destacan los 14.446 millones procedentes del IBI, seguidos de los 6.934 millones por tasas y servicios. Por el impuesto de circulación obtienen 2.395 millones.
El gasto por habitante es de 1.082,4 euros, siendo un 42,5% más elevado en los municipios de más de un millón de habitantes. País Vasco (1.354 euros), Cataluña (1.274 euros) y Aragón (1.173 euros) son las regiones con mayor reparto.
La cesta de impuestos municipal se completa con la cesión de ingresos del Estado. Cuentan con una parte del IRPF e IVA, así como de los impuestos especiales sobre alcohol, hidrocarburos y tabaco, que oscila entre el 1% y el 3%.
