Diana Morant (Ministra de Ciencia): “Hemos pasado de despreciar el talento a buscarlo debajo de las piedras”
La ministra afirma con orgullo que somos el segundo país de Europa que más dinero está destinando a la I+D y resalta los logros del sector aeroespacial, como el primer cohete español
En su despacho del ministerio, decorado con cuadros del Reina Sofía de artistas valencianos –un guiño a su origen–, nos recibe Diana Morant (Gandía, 1980). Refleja el entusiasmo que da contar con cuentas públicas récord y el reto de aprobar, antes de terminar la legislatura, una ley que agilice la burocracia.
Tiene el presupuesto más alto que ha tenido este ministerio nunca, ¿cómo lo ha distribuido?
Tenemos el doble de presupuesto del Partido Popular. Hemos crecido en 2023 como presupuesto nacional el 20% (hasta 2.610 millones de euros) y se ha duplicado el global con los fondos europeos. Somos el segundo país de Europa que más dinero está destinando a la I+D. Repartimos más dinero para hacer investigación y para la mejora de las infraestructuras. En muchas ocasiones, los científicos lo que necesitan es que los laboratorios tengan los equipos de vanguardia, y hacía diez años que no salía una convocatoria de equipamientos. Y también estamos destinando dinero a la transferencia de conocimiento, que es el paso de la ciencia y la innovación al mundo práctico. Arrastramos al sector empresarial para que innove más. Por ejemplo, en Alemania, que es un buen país de inversión en ciencia, el 30% es pública y el 70%, privada. En nuestro país estamos en un 50%-50%.
Las empresas se quejan de que el dinero llega a través de préstamos y que son muy difíciles de conseguir....
Las empresas saben que tenemos siempre las líneas del CDTI abiertas, es nuestra agencia financiadora del sector empresarial. Y estas líneas tienen una parte de subvención, que ha subido un 80% desde 2018 con los fondos UE, y otra de crédito. Tienen una buena acogida, pues en 2022 se realizaron 1.771 operaciones, con un presupuesto total de 1.253 millones de euros, de los que 888 fueron financiados por el CDTI: 457 millones en préstamos y 432 millones en subvenciones.
“Con los nuevos contratos indefinidos los científicos han dejado de ser eternos adolescentes, eternos becados”
¿Llega el dinero a las pymes?
Estamos financiando a la empresa privada a través de las misiones, inspiradas en la misión de Kennedy de llevar al hombre a la Luna y la recuperación de esa filosofía por parte de la profesora Mazzucato. Desde 2018 hemos lanzado tres convocatorias. En 2022, seis proyectos de mucha envergadura, para solucionar los grandes retos que tenemos, como el cambio climático, la economía circular, el hidrógeno verde o las terapias de vanguardia. La mitad del dinero ha ido a parar a pymes.
“La mitad del dinero de las misiones del CDTI, nuestra agencia financiadora, ha ido a parar a las pymes”
Y los Perte...
El gran modo de trabajar con las empresas es ahora con los Perte: el del vehículo eléctrico, el aeroespacial, el de salud, el de energías renovables... También tienen la filosofía de las misiones, objetivos a alcanzar.
¿Qué destacaría del Perte aeroespacial?
El Estado hace una inversión cercana a los 3.000 millones de euros y pretendemos movilizar inversión privada. Tras el farmacéutico, el aeroespacial es el segundo sector que más invierte en I+D. Cada uno de nosotros utilizamos al día unos 200 satélites, cuando usamos el móvil, la radio o el GPS. Muchas de las soluciones de nuestro día a día vienen del espacio para telecomunicaciones, seguridad, lucha contra el cambio climático y servicios. Nos ayudan en emergencias como los incendios o la lucha contra la sequía. Además, hay un cohete que ha sido diseñado, fabricado y que se va a lanzar desde España por primera vez a través de una empresa española, PLD Space. Hemos conseguido después de 30 años nuevos astronautas para hacer la carrera espacial dentro de la ESA.
¿Qué ventaja tiene la creación de la Agencia Espacial Española?
Queremos afianzar nuestra posición de liderazgo en el sector del espacio en Europa y generar nuevas oportunidades. Empresas de nuestro país van a participar, por ejemplo, en la fabricación de los sistemas que van a recoger muestras del ecosistema de Marte. Vamos a lanzar una constelación, junto con Portugal, para mejorar la observación de la Tierra, que a día de hoy la hacemos a través de Copernicus, que es un sistema que nos da muestras cada cuatro días, pues vamos a recibir datos cada cuatro o cinco horas.
“Cada día utilizamos unos 200 satélites con el móvil, la radio o el GPS. Nos ayudan en múltiples servicios de seguridad y emergencias naturales”
La instalación de la sede de la Agencia Espacial en Sevilla ha recibido críticas de Aragón, Castilla y Madrid.
La noticia es que, por fin, España tiene una agencia espacial propia. Éramos de los pocos países de Europa que no la teníamos. Hacía 40 años que se hablaba de su creación. Es un logro como país. El presidente Sánchez siempre ha dicho que se hace una mejor España desde toda España. Estas entidades de la Administración General del Estado crean un ecosistema innovador con los centros de universidades y las empresas que se asientan en su entorno, que se tiene que aprovechar por parte de toda España. Se hizo un concurso con 21 candidatos y Sevilla ganó por condiciones objetivas.
¿Tiene previsto elevar su participación en alguna empresa?
Esa decisión depende del Ministerio de Economía. En el Perte aeroespacial trabajamos con las empresas privadas y con las participadas, como Indra o Enaire, para temas de control aéreo. Nuestra inversión en espacio a través de la ESA, que ha crecido en un 50%, retorna en oportunidades, como las dos nuevas incubadoras ESA-BIC en Castellón y Sevilla, que se suman a las de Madrid y Valencia. Entre otras iniciativas, GMV ha sido la primera que ha ganado un concurso en Australia y Nueva Zelanda, por 180 millones de euros. Destaca el consorcio Arrakihs, de empresas y centros de investigación, que lidera por primera vez una misión espacial de la ESA. Y Airbus España está desarrollando la cola del avión y la propulsión con cero emisiones mediante hidrógeno verde.
¿Cuáles son los principales objetivos en salud?
Es una de las patas fundamentales del ministerio. Queremos que se investiguen y diseñen nuevas terapias avanzadas (cáncer infantil, diabetes...). Somos un país líder, solo por detrás de EE UU, en ensayos clínicos, y uno de los que más pronto hace llegar los tratamientos al paciente [la demora supera los 600 días, frente a los 147 de Alemania]. Todas las farmacéuticas se fijan en España y realizan aquí sus ensayos.
Queremos que estas terapias que somos capaces de investigar y desarrollar, una vez se patenten y se conviertan en medicamento, se fabriquen en España y podamos administrarlas a través del Sistema Nacional de Salud. Vamos a crear una sociedad mercantil participada por el Gobierno a través del Ministerio de Ciencia y por las farmacéuticas.
Sobre la vacuna Hipra, ¿cuándo estará en el mercado?
Antes de la pandemia en nuestro país no teníamos ninguna empresa que fabricara una vacuna humana. Hipra, de vacunas veterinarias, se reconvirtió y ha conseguido que la Agencia Europea del Medicamento apruebe y autorice su vacuna de refuerzo del Covid-19. Hemos entrado en el podio de los siete países del mundo que hemos sido capaces de desarrollarla, el único de la UE. Ya se han fabricado las primeras dosis y ahora están firmando los acuerdos comerciales.
¿Por qué es tan difícil pasar del laboratorio a las ventas?
Ocupamos la décima posición en el ranking mundial en producción científica, pero la trigésima en innovación. Podemos descubrir una terapia, pero no conseguimos que se fabrique en nuestro país. Por ello, tenemos que darle una cálida bienvenida al Instituto Fraunhofer, el más importante en transferencia del conocimiento, que se instalará en Barcelona como una fundación y que pondrá en marcha un centro de investigación en bioingeniería aplicada a la salud en colaboración con el Instituto de Bioingeniería de Cataluña (IBEC). Del Perte de salud, uno de cada tres euros va a Cataluña.
Apuesta por la compra innovadora, ¿puede explicarlo?
Tiene mucho éxito; en muchos casos, el miedo que da innovar es que no se sabe si va a tener un retorno económico. Lo que hacemos es que nos convertimos en el primer cliente de ese producto. Un ejemplo es la compra de dos prototipos para el Centro de Cirugía de Mínima Invasión de Cáceres, que ayudan a que los órganos que se donan se mantengan más tiempo. Esto no se habría desarrollado si el primer cliente no hubiese sido público.
“Aspiramos a consolidar en 2030 una inversión en ciencia del 3% del PIB, con el apoyo de las autonomías y la inversión privada”
¿Qué aportan los planes complementarios?
Hemos presentado ocho planes que complementan el resto de líneas del ministerio. En vez de trabajar bilateralmente, el Gobierno de España y el Ministerio de Ciencia, con las comunidades autónomas, trabajamos en red con las 17 autonomías. Hemos invertido 465 millones de euros. El Gobierno de España ha puesto el 60% y el 40% las autonomías. En el de biodiversidad se investigan la emergencia climática, el calentamiento del agua...
Ha contado con presupuestos récord, ¿qué ocurrirá cuando se acaben los fondos de la UE?
Afortunadamente, aprobamos la ley de ciencia sin ningún voto en contra. El compromiso público es dedicar el 1,25% del PIB a I+D en 2030 y llegar al 3% sumando la inversión privada, en línea con los objetivos de la ley de la ciencia. Es un esfuerzo que también deben hacer las autonomías y esperamos que cuando se acabe el plan de recuperación encontremos la mejor manera de financiar a la ciencia.
¿Tiene algo pendiente?
Hemos aprobado un plan de 25 millones para retención y atracción de talento. Vamos a traer a 25 científicos top al año. Antes de que finalice la legislatura, me queda por aprobar un plan de reducción de la burocracia, que es una de las grandes demandas de las empresas y los científicos. Y es el gran reto.
¿Qué opina de Doñana?
Que se escuche a la ciencia, que es muy clara con Doñana, un ecosistema enfermo. El gran problema es que hay una sobreexplotación del agua. El camino para curar Doñana es cerrar los pozos ilegales y perseguir los regadíos ilegales. Lo que propone el Gobierno andaluz va en contra del plan hidrológico aprobado por el Gobierno y la sentencia de la Comisión Europea. Podríamos perder el sello de la Unesco.
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Condiciones del empleo
¿Qué se está haciendo para mejorar el empleo y retener el talento?
Hemos pasado de despreciar el talento científico e innovador a buscarlo por debajo de las piedras. Estamos haciendo que retorne nuestro talento. La convocatoria del año pasado de los contratos Ramón y Cajal consiguió que retornarán a España un 15% y otro 25% se cubrió con extranjeros.
¿Cuál es su opinión sobre los nuevos contratos a los científicos?
Con la nueva ley hemos reconocido el derecho a tener un contrato indefinido y salir de la precariedad. Los científicos se sentían tratados como eternos adolescentes, eternos becados. Es un salto de gigante, pues antes no podían ni pedir una hipoteca. Hemos elevado las indemnizaciones por finalización de los contratos predoctorales y posdoctorales, subvencionados por el Gobierno de España, dibujando una carrera científica.
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