Max da el paso que nadie deseaba: comienza a cobrar por compartir cuentas
Inicialmente, esto afecta a EEUU, pero la llegada a otras regiones es cuestión de tiempo
En el competitivo mundo del streaming, las plataformas buscan nuevas formas de rentabilizar sus servicios y adaptarse a los hábitos de consumo de sus usuarios. Max, antes conocida como HBO, ha decidido seguir el modelo que ya han implementado por su competencia, como por ejemplo Netflix y Disney+: este no es otro que poner fin al intercambio gratuito de cuentas entre personas que no conviven bajo el mismo techo. A continuación, te explicamos en detalle cómo será este nuevo sistema y qué implicaciones tendrá para los suscriptores en España.
El fin de compartir cuentas sin restricciones llega a Max
Hasta ahora, compartir la cuenta de Max con amigos o familiares era una práctica habitual -y sencilla-. Bastaba con facilitar el usuario y la contraseña para que varias personas pudieran disfrutar del catálogo de la plataforma, incluso si no vivían en el mismo domicilio. Sin embargo, esta situación está a punto de cambiar. El servicio ha confirmado que comienza a implementar un sistema para limitar lo que hemos indicado antes.
La plataforma ya ha comenzado a enviar notificaciones a los usuarios que comparten cuenta, advirtiendo que el servicio dejará de permitirlo en breve. Este proceso será gradual y se espera que, a lo largo de 2025 y 2026, se endurezcan las medidas para detectar y bloquear las cuentas compartidas entre personas que no pertenezcan al mismo hogar.
Todo puede seguir igual… si pagas
A partir de la entrada en vigor de esta nueva política, quienes deseen compartir su cuenta de Max con alguien que no viva en su domicilio tendrán que pagar un suplemento mensual. El servicio añade la opción de añadir un Miembro Extra a la suscripción, permitiendo que esa persona tenga acceso independiente al servicio, con sus propias credenciales y perfil personalizado.
El precio de este complemento es de 7,99 dólares al mes en EEUU (primer lugar donde se aplican las nuevas normas, pero es seguro que todo esto llegará a otras regiones). Es importante destacar que solo se podrá añadir un miembro extra por cuenta, y que este usuario podrá reproducir contenido en un solo dispositivo a la vez, aunque disfrutará de todas las ventajas del plan principal, como la visualización en 4K Ultra HD si la cuenta principal lo permite.
Es importante tener en cuenta que esta nueva funcionalidad de Miembro Extra no estará disponible para todos los usuarios. Por ejemplo, quienes tengan contratados paquetes combinados que incluyan Max junto a otras plataformas como Disney+ o Hulu no podrán acceder, de momento, a esta opción.
¿Qué ocurre con los perfiles existentes?
Para aquellos usuarios que hasta ahora utilizaban un perfil en la cuenta de otra persona fuera de su hogar, Max ofrecerá la posibilidad de transferir su perfil a una nueva cuenta. De este modo, podrán conservar su historial de visualización, recomendaciones personalizadas y listas de favoritos, facilitando la transición hacia una suscripción independiente o como miembro extra en otra cuenta.
¿Por qué Max toma esta decisión?
El intercambio de contraseñas entre personas que no conviven supone una pérdida de ingresos para las plataformas de streaming, que buscan maximizar sus beneficios y garantizar la sostenibilidad de su modelo de negocio. Max, al igual que otros servicios, ha decidido actuar para frenar esta práctica y fomentar que cada usuario pague por su propio acceso, o bien, que quienes deseen compartir lo hagan pagando un suplemento.
Según responsables de la compañía, el objetivo es ofrecer una transición sencilla y sin interrupciones para los usuarios, permitiendo que quienes ya comparten cuenta puedan adaptarse al nuevo sistema sin perder el acceso a sus perfiles y preferencias.
Cómo afectará este cambio a los usuarios en España
Para los usuarios españoles, la llegada de este sistema supondrá un ajuste en la forma de compartir y pagar por Max. Si hasta ahora era habitual dividir el coste de la suscripción entre varias personas, a partir de la implantación de la nueva política, solo quienes vivan en el mismo domicilio podrán seguir haciéndolo sin coste adicional. El resto deberá optar por pagar el suplemento (lo normal es que sea de 7,99 euros al mes por cada miembro extra), o bien, suscribirse de forma independiente.
Esta medida, aunque impopular entre quienes compartían cuenta con amigos o familiares lejanos, se enmarca en una tendencia global del sector del streaming. Netflix ya ha demostrado que, pese a las críticas iniciales, la limitación del uso compartido puede traducirse en un aumento de suscriptores de pago. Max espera replicar este éxito, aunque el tiempo dirá cómo reaccionan los usuarios y si la plataforma logra mantener su atractivo en un mercado cada vez más competitivo.
