Kuiper pasa a ser Amazon Leo: así es la competencia directa de Starlink
La compañía liderada por Jeff Bezos da este paso como inicio de un despliegue mucho más masivo y completo. Lo cierto es que Elon Musk debería estar bastante preocupado.
Tras años de desarrollo -concretamente siete- Amazon ha anunciado oficialmente el nombre de su ambiciosa red de internet por satélite: Leo. Lo que durante años se conoció internamente y en la industria como Proyecto Kuiper. Esto significa que la compañía da el paso para convertirse en una marca comercial completa y, por lo tanto, simboliza la madurez de una iniciativa que busca llevar Internet de alta velocidad a los rincones más desatendidos del planeta.
El nombre Leo es una referencia directa y clara a su tecnología fundamental: Low Earth Orbit -Órbita Terrestre Baja-. Es en esta región, a altitudes que varían entre los 590 y 630 kilómetros sobre la superficie terrestre, donde Amazon está desplegando su constelación de satélites. La misión, que sigue siendo la misma desde su concepción, es ambiciosa: cerrar la brecha digital que aún afecta a miles de millones de personas y ofrecer una conectividad fiable a millones de empresas, gobiernos y organizaciones que operan en zonas sin infraestructura terrestre adecuada.
Un proyecto completado y que da un nuevo paso
El camino desde Proyecto Kuiper ha conseguido llegar a buen puerto: la compañía ha conseguido las licencias iniciales de la FCC (Comisión Federal de Comunicaciones de EEUU), que le exige tener la mitad de su constelación operativa para julio de 2026. Además, ha firmado los que se consideran los mayores contratos de lanzamiento comercial de la historia, asegurando espacio en cohetes de Arianespace, United Launch Alliance (ULA), la propia Blue Origin de Jeff Bezos e incluso de su competidor directo, SpaceX.
Tras el éxito de los prototipos, Amazon ha acelerado el despliegue. Actualmente, la red de Leo cuenta con más de 150 satélites en órbita. Este despliegue se alimenta de una de las líneas de producción más grandes del planeta, ubicada en Kirkland, Washington -capaz de fabricar hasta cinco satélites diarios-. A esto se suma una instalación de procesamiento de 140 millones de dólares en el Centro Espacial Kennedy de Florida, dedicada a preparar las naves para su lanzamiento.
La propuesta de Amazon Leo se diferencia en varios frentes frente a sus rivales (es inevitable pensar en Starlink de SpaceX). Así, por ejemplo, la compañía de Jeff Bezos apuesta por una integración profunda con su ecosistema existente. La red del servicio está intrínsecamente conectada con Amazon Web Services (AWS), lo que promete una red terrestre global, segura y de baja latencia que complementa la infraestructura espacial.
Pero, ¿qué significa realmente Amazon Leo para los usuarios?
La compañía ha centrado su comunicación en la experiencia de uso, prometiendo velocidades que permitirán realizar videollamadas fluidas, transmitir contenido en 4K y gestionar descargas y subidas de gran volumen simultáneamente. Y, todo ello, con la fiabilidad que la órbita baja proporciona al reducir drásticamente el tiempo de respuesta (latencia).
Para materializar esta conexión, Amazon ha diseñado internamente tres modelos de antenas o terminales de cliente, cada uno adaptado a necesidades específicas, destacando por su tecnología de antena de matriz en fase que, según Amazon, es la primera comercial capaz de soportar velocidades de gigabit.
Estos son los terminales que definirán la experiencia Amazon Leo desde ahora:
- Amazon Leo Nano: es la solución portátil. Con un diseño cuadrado de solo 7 pulgadas (unos 18 cm) y un peso de 2,2 libras (aproximadamente 1 kg), este terminal es lo suficientemente compacto para llevarlo en una mochila. A pesar de su tamaño, es capaz de ofrecer velocidades de hasta 100 Mbps, permitiendo streaming en 4K y videollamadas en cualquier lugar.
- Amazon Leo Pro: este es el equilibrio entre potencia y tamaño. Mide 11 por 11 pulgadas (unos 28 cm) y pesa 5,3 libras (unos 2,4 kg). Está diseñado para ser la solución estándar para hogares y pequeñas empresas, ofreciendo velocidades de descarga de hasta 400 Mbps. Es un terminal resistente, probado para funcionar en diversas condiciones climáticas. Se indica que es ideal para el uso residencial que requiere múltiples conexiones simultáneas.
- Amazon Leo Ultra: hablamos de la opción de mayor rendimiento de la gama. Con un tamaño considerable de 20 por 30 pulgadas (51 por 76 cm) y un peso de 43 libras (casi 19,5 kg), esta antena está diseñada para las necesidades más exigentes de empresas, gobiernos y aplicaciones industriales. Ofrece las velocidades más rápidas de la red, alcanzando hasta 1 Gbps, suficiente para conectar miles de sensores IoT, múltiples cámaras de alta definición o dar servicio a infraestructuras críticas.
Más allá del uso en los hogares
Amazon Leo no solo apunta al consumidor residencial. La lista de socios comerciales que ya se han comprometido con el servicio demuestra un fuerte enfoque empresarial y gubernamental. Compañías como JetBlue utilizarán Amazon Leo para ofrecer WiFi gratuito y de alta velocidad en sus vuelos a partir de 2027. L3Harris integrará la red en sus servicios para clientes de defensa y gobierno. En el ámbito de las telecomunicaciones, socios como DIRECTV Latin America, Sky Brasil y NBN Co. (la red nacional de banda ancha de Australia) utilizarán Amazon Leo para extender sus servicios a zonas de difícil acceso.
Aunque la compañía aún no ha fijado una fecha de lanzamiento comercial definitiva para el público general, limitándose a indicar que comenzará a desplegar el servicio "una vez que hayamos añadido más cobertura y capacidad a la red“, fuentes apuntan a que las primeras ofertas comerciales podrían llegar a finales de 2025 o principios de 2026. La presión de las licencias de la FCC para 2026 antes mencionada sugiere que la compañía no tiene tiempo que perder.
