Los adolescentes y su relación con la tecnología: la mayoría piensan que deben cambiar sus hábitos
Una investigación de la Fundación Orange, GAD3 y Save the Children así lo acredita
En el mundo actual, la relación de los jóvenes con las pantallas y el entorno digital (se podría decir que con la tecnología en general), se ha convertido en un tema de gran importancia para familias, educadores y la sociedad. La Fundación Orange, en colaboración con Save the Children y GAD3, ha presentado un estudio al respecto titulado “Infancia y adolescencia en entornos digitales” con el objetivo de ayudar a comprender las oportunidades, riesgos y desafíos que enfrentan, entre otros, los adolescentes.
El estudio, basado en entrevistas a más de 2.500 padres, jóvenes, profesores y población general -así como conversaciones de valor con 17 expertos-, arroja luz sobre algo que cada vez parece estar más claro: la necesidad de un cambio en los hábitos digitales de los jóvenes. Algunos de los motivos que se pueden ver en el informe es que el 93% de los adolescentes encuestados considera que debería cambiar alguno de sus hábitos actuales -concretamente, en el uso de las pantallas-. Este ya es un síntoma muy significativo respecto a cómo está la situación.
Entre las medidas que creen que se pueden tomar para tener un mejor uso de la tecnología, hay algunos datos que son destacables. Así, por ejemplo, reducir el tiempo de conexión es la más mencionada por los adolescentes (54%), seguida de dedicar más tiempo al deporte (39%) y, para sorpresa de muchos, una de las claves es no dormir cerca de un dispositivo digital (34%). Todo bastante sensato.
Es una responsabilidad de todos, no solo de los jóvenes
Esto es algo que queda claro, ya que, por ejemplo, el estudio revela que el 14% de los adolescentes afirma que sus padres usan el móvil o las plataformas digitales más que ellos -con una media de entre 4 y 5 horas al día-. Esta realidad subraya la importancia del ejemplo que los adultos dan en cuanto al uso responsable de la tecnología, algo que deja claro que el conjunto de las familias son las que deben tomar cartas al respecto.
El informe también explora los riesgos digitales y la percepción que tienen los jóvenes de ellos. La gran mayoría de los adolescentes (81%) y de la población en general (89%) son conscientes de los riesgos en el entorno digital y entienden la importancia de la protección de la privacidad. Sin embargo, más de la mitad de estos -y también los adultos- afirman no saber cómo proteger su información personal en Internet. E, incluso, un porcentaje muy elevado reconoce no tener muy claro cómo diferenciar información falsa en el entorno digital.
Otro de los factores de preocupación para los adolescentes es la huella digital. Casi la mitad de los que han formado parte del estudio (46%) se muestran preocupados respecto al rastro que sus actividades dejan en internet y, por extensión, consideran necesario reducir la autoexposición y cuidar los contenidos que comparten. En el caso de los adultos, esta preocupación aumenta considerablemente (hasta un 65%), demostrando la importancia que le dan a este apartado vital en lo que tiene que ver con la privacidad.
La educación es clave… y la llegada de la IA
El estudio de la Fundación Orange y Save the Children también subraya la necesidad de una mayor educación digital para los jóvenes. Los expertos, así como la sociedad en general, coinciden en que la responsabilidad de educar a los jóvenes sobre el correcto uso de la tecnología recae principalmente en los padres. Los adolescentes también destacan a estos como los principales responsables de su formación digital, aunque mencionan el rol de otros agentes como el personal docente, los centros educativos y la Policía Nacional.
La supervisión parental y el derecho a la intimidad de los menores también son temas que aborda el informe. Hay que destacar a este respecto que el 61% de los padres utiliza herramientas de control parental para supervisar las actividades de sus hijos en Internet, aunque este porcentaje disminuye al 56% entre aquellos con hijos de 13 a 17 años. Un dato interesante aquí: la mayoría de los adolescentes (65%) se queja de que estas herramientas limitan su privacidad (a destacar que el 60% de los adolescentes sabe cómo saltarse estas herramientas de protección).
Finalmente, en el estudio también se refleja la irrupción de la inteligencia artificial como desafío y oportunidad en el ámbito digital. El estudio de la Fundación Orange y Save the Children destaca la importancia de la vigilancia y el acompañamiento por parte de los padres y profesores para que la utilización de la IA en la educación sea eficiente, ética y no perjudique el desarrollo de los jóvenes.
El informe “Infancia y adolescencia en entornos digitales” de la Fundación Orange y Save the Children ofrece una visión completa de la relación de los jóvenes con la tecnología. El estudio destaca la necesidad de un cambio en los hábitos digitales, tanto de los jóvenes como de los adultos, y subraya la importancia de la educación y la reflexión sobre el uso ético de la inteligencia artificial.