¿Desbloqueas tu iPhone con el Apple Watch cuando llevas mascarilla? Atento a este problema
Face ID no mira quién está debajo de la mascarilla.
La pandemia de Covid-19 que se declaró en marzo de 2019 en todo el mundo provocó que el gran invento de Apple, presentado solo dos años antes, dejara de tener utilidad cuando salíamos a la calle armados con una mascarilla en la cara. Y es que la clave de Face ID es que sea capaz de leer nuestra cara por lo que si no puede hacerlo...
Prácticamente un año después, Apple ha encontrado una solución, que es la de permitir a los usuarios con un Apple Watch que utilicen este dispositivo como llave para desbloquear el teléfono cuando Face ID detecta que llevamos puesta una mascarilla. Algo que podríamos pensar que es totalmente seguro y, aunque en un porcentaje muy elevado de los casos es así, existe una pequeña posibilidad de que tengamos problemas.
Menos seguro sin Face ID
La falla de este nuevo sistema de desbloqueo anti-mascarillas que Apple ha introducido es que, en el momento en el que indicamos que recurra a la llave del Apple Watch, todo el sistema de detección biométrica que impide que un desconocido acceda a nuestro teléfono no funciona. Y a partir de ese momento da igual quién esté detrás de la mascarilla: con que tengamos el reloj puesto, ya podremos colarnos en el iPhone sin problemas.
Es decir, que cuando Face ID mira para ver si llevamos la mascarilla, no busca siquiera un porcentaje de coincidencia en el resultado del escaneo, mirando a ver si alguna parte coincide con el patrón que tiene almacenado de nuestra cara, por lo que da por bueno a cualquiera que lleve puesto nuestro reloj en la muñeca. De esta forma, si una hermana, hija, abuela o amiga se pone nuestro smartwatch, podrá desbloquear nuestro iPhone con la mascarilla puesta.
Se trata, como podéis imaginar, de un riesgo importante en aquellos casos en los que el código PIN de vuestro reloj (que es necesario para que esté operativo) sea conocido por otros miembros de la familia o vuestro entorno de amistades, que podrían tener la tentación y vía libre para mirar lo que almacenáis en el iPhone. Se trata, obviamente, de una posibilidad no muy habitual, pero que hay que tenerla en cuenta por si acaso. En este punto, no estaría de más que Apple arreglara esta pequeña falla, añadiendo ese porcentaje mínimo de coincidencia en el escaneo de nuestra cara por parte de Face ID para, así, garantizar que quien está desbloqueando el iPhone es su dueño legítimo.