Cómo activar el modo privado de Spotify para que nadie sepa lo que escuchas
Descansa de mostrarle al mundo todo lo que haces.
Estamos en un mundo social. Y eso significa que todos los que nos rodean, conocidos o no, pueden saber a dónde vamos, qué nos gusta, qué nos compramos, qué series estamos viendo, las películas que nos apasionan e incluso los temas musicales que ahora mismo se están reproduciendo en nuestro smartphone. En definitiva, ¿nos queda algún reducto de privacidad?
Cuando todo lo anterior lo hacemos a sabiendas, nos queda el consuelo de que somos nosotros los responsables y que, por muy tarde que nos parezca, todavía podemos ponerle coto a esa fuga de intimidad. Y Spotify, como otras muchas apps en los últimos tiempos, nos da la oportunidad de dejar nuestros gustos musicales para nosotros. Sin que nadie más nos cotillee.
Modo privado de Spotify
Seguro que eso del modo privado os suena de otras apps tan populares como por ejemplo Chrome o Google Maps, por lo que en la plataforma de streaming musical viene a ser lo mismo. Cierra el grifo y evita que todos los que nos siguen, o pasan en ese momento por nuestro perfil, puedan ver lo que estamos escuchando. Así que os vamos a contar cómo recuperar ese blindaje de manera permanente, o temporal, como más os guste.
Lo primero que tenéis que hacer es ir a la aplicación de Spotify en iPhone o Android y tocar en el icono que tenéis en la parte superior derecha de la pantalla, el de "Configuración". Una vez dentro, descendemos por los menús hasta "Social". Tocamos allí y terminaremos en una última página donde aparece la opción que queremos, en este caso, activar.
Se trata de crear una "sesión anónima", que impedirá que los que visitan nuestro perfil puedan saber qué estamos escuchando. Por defecto viene desactivado, así que tocamos en el switch para cambiar su posición. De todas formas, en esta pantalla tenéis otras dos opciones que a lo mejor os interesan, sobre todo si estáis en esa época de no querer exponeros demasiado ante el análisis de los más cotillas.
Se trata de evitar que quienes te siguen puedan ver lo que estás escuchando y, también, eliminar el listado con los últimos artistas a los que has prestado atención. Así, activando la primera de todas las funciones y quitando las otras dos, vuestra huella social en Spotify será mucho menor y podréis descansar tranquilos de esos que os preguntan que por qué dejaste de escuchar a tal artista, o por qué has vuelto a aquel otro.