Samsung añade un medidor de tensión arterial a sus Galaxy Watch
Los relojes ya ofrecen mediciones con sus actuales sensores.
Cuando empezaron a llegar en 2012 y 2013 los primeros smartwatch de las principales compañías, como Samsung, quedó claro que su principal preocupación sería la de medirnos nuestra actividad física diaria. Luego llegó en 2015 Apple y tras un comienzo errático con su Watch, un año más tarde empezó a corregir el rumbo: la salud es lo primero.
Fue ese pistoletazo de salida para una competición que está llevando a estos relojes inteligentes a tener cada vez más funciones esenciales para mantenernos sanos y monitoreados, para evitar problemas de salud. Y si casi todos cuentan con sensores que miden la frecuencia cardíaca, o el Apple Watch, que dispone también de un sofisticado sistema capaz de realizar electrocardiogramas, ¿por qué no dar el salto para medir la presión arterial?
Todos los Galaxy Watch Active
Samsung acaba de anunciar que todos sus relojes inteligentes de las gamas Galaxy Watch Active (1 y 2) pueden tomar datos de tensión arterial de los usuarios gracias a los sensores de los que ya disponen y que han sido bendecidos y aprobados por la MFDS, es decir, el Ministerio de Seguridad de Alimentos y Medicamentos de Corea del Sur.
De esta manera, se convierte en una "solución autorizada por el gobierno, sin receta y aplicación de monitoreo de presión arterial" que podremos llevar a cabo a través de la suite Health de los coreanos. Un detalle importante que permitirá a quienes padecen de una tensión alta de tener que llevar consigo un tensiómetro que, queramos o no, es más engorroso que recurrir a este reloj.
Para medir la tensión arterial con precisión, los relojes necesitan de la guía de un aparato médico como el que tienen en casa muchos hipertensos. De esta manera, cuando queramos configurarlo, lo primero será realizar una medición con nuestro tensiómetro para introducir los datos en la aplicación. Esos números los añadimos a Samsung Health, que los tomará como referencia para ofrecer todas las lecturas posteriores con el smartwatch.
Este proceso no solo es importante la primera vez que usemos esta función en nuestro Samsung Galaxy Active, sino que los coreanos recomiendan repetirlo cada cuatro semanas, para que las mediciones se vayan reajustando. Esta función se une, casi de inmediato, a otra que llegó la semana pasada a cuenta de la crisis del coronavirus, cuando Samsung incluyó en todos sus wearables una alarma que nos avisa de cuándo nos debemos lavar las manos. Algo que las autoridades sanitarias no paran de repetir y que sitúan como una de las medidas que debemos tomar. Tan importante, incluso, que el llevar mascarilla.