Google cuenta entre sus aplicaciones con Google Pay, el sistema destinado a pagos con el móvil, aunque la gran compañía quiere un paso más allá y ya trabaja en la alternativa a Apple Card. La tarjeta de crédito que Apple lanzó en Estados Unidos, principalmente destinada a utilizarse junto Apple Pay, haciendo que muchos usuarios optarán por ella.
Google quiere demostrar que ellos también pueden, evitando quedarse únicamente en una aplicación y llegando más allá, ofreciendo un completo producto financiero. El nombre del proyecto sería Caché, que junto a la colaboración de CitiGroup y Stanford Federal Credit Union estaría preparándose para la llegada de sus propias cuentas corrientes. Un movimiento sin igual en el mundo de la tecnología que podría activar la misma maquinaria y grandes campañas de marketing en otras importantes compañías, ¿os imagináis el banco de Xiaomi?.
Integrar pagos y cuentas en Google Pay
La idea de la compañía se ubica en integrar todas sus propuestas relacionadas con el dinero y los pagos en Google Pay. De este modo la popularidad, opciones y posibilidades de que los usuarios tengan que utilizar esta app aumentaría, cuantas más funciones, más imprescindible se convierte para los usuarios.
CitiGroup y Stanford serían los socios principales y en todo momento quedaría constancia de ello, de este modo dándoles la importancia que merecen y evitando así problemas legales o burocráticos a la hora de disponer del dinero de quienes opten por esta alternativa.
¿Comisiones a cambio de...?
Es pronto para conocer si Google Cache cobrará comisiones, aunque por la información obtenido, hay posibilidades de que no fuera así o se integrase de algún modo entre los servicios de Google. ¿Quiere esto decir que Google regalaría una cuenta bancaria a cambio de nuestros datos? Es una posibilidad que no debemos descartar, aunque habrá otras opciones.
El estrecho vínculo entre Google y los usuarios Android nos hace imaginar un sistema donde a cambio de transacciones, podamos conseguir beneficios para conseguir sus dispositivos, por ejemplo en la plataforma Google Stadia, en los dispositivos Pixel o incluso en los altavoces Google Home. De igual manera podría ser recíproco y que todo el ecosistema de Google se siga autoalimentado, para conseguir que la nube siga creciendo; las posibilidades e ideas no parecen tener fin.