Xiaomi lanza una regleta eléctrica con Wifi que se conecta al móvil
Una novedosa regleta que podemos controlar desde el móvil
La capacidad de Xiaomi para ingeniar nuevos dispositivos electrónicos inteligentes no parece tener límite. La firma china es especialista ya en ofrecer nuevas funcionalidades a objetos cotidianos, a través de las conexiones inalámbricas mediante las cuales podemos controlar el funcionamiento de estos. Pues bien, Xiaomi, que por cierto, esta semana ha lanzado sus productos en España, y mañana abre sus primeras dos tiendas en nuestro país, en la comunidad de Madrid, ha lanzado nada menos que una regleta eléctrica que se conecta al móvil para controlar su uso.
Un uso personalizado de la regleta
A aquellos que penséis que una regleta no tiene mucha vuelta de hoja, y que no se puede hacer mucho más con ella que conectar los distintos dispositivos, nada más lejos de la realidad en el caso de Xiaomi. Porque esta nueva regleta Xiaomi cuenta con conectividad Wifi y permite enchufar en ella dispositivos con enchufes europeos, americanos, británico, chinos o australianos. Además cuenta con tres puertos USB que nos permiten cargar los dispositivos sin necesidad de adaptadores o transformadores de corriente adicionales. Esta regleta nos ofrece mucha información adicional sobre su uso.
Con ella por poner un ejemplo, podemos programar su encendido, conocer nuestras estadísticas de consumo de energía, además cuenta con un interruptor táctil con el que podemos apagar y encender la regleta sin necesidad de otros dispositivos, como se hace tradicionalmente en el resto de regletas de este tipo. Al conectarse la regleta con el móvil podemos conocer todos estos datos y detalles directamente en la pantalla de este, gracias a la conexión inalámbrica Wifi con la que podemos realizar las mismas funciones que con el panel táctil, con la diferencia de que podemos almacenar todos los datos y estadísticas.
Por otro lado se apaga sola al detectar una sobrecarga de 10 amperios, mientras que puede aguantar temperaturas de 750 grados, ofreciendo además protección para que los niños no puedan electrocutarse de manera accidental. Aguanta 2500 vatios, sus dimensiones son de 241 x 42 x 26 mm y pesa 330 gramos. El cable mide 1,8 metros y su precio es de 12,8 euros.