El nuevo OnePlus 3 ya calienta motores con Android 7.0
No queda mucho tiempo para que un nuevo miembro de la gama OnePlus 3 sea de la partida en el mercado, y de él hay que esperar lo mejor ya que como siempre ofrecerá una excelente relación calidad/precio. Además, este dispositivo, llega como respuesta a las evoluciones que otras compañías ya han anunciado en sus terminales de gama alta, como por ejemplo el Xiaomi Mi5S, uno de sus competidores directos.
Para empezar, hay que comentar que como se ha conocido el dispositivo ya ha pasado las pruebas de certificación en China, con la nomenclatura A3010, y uno de los detalles es que su especificación final será OnePlus 3T, por lo que se dejarçia atrás la habitual letra “S” que otras compañías ponen a las evoluciones y de esta forma conseguiría diferenciarse de ellos. No aparece una mala solución, la verdad.
La pantalla no parece que vaya a cambiar mucho respecto a la que es de la partida en el OnePlus 3, ya que mantendría las 5,5 pulgadas en lo referente a las dimensiones y, la resolución, se mantendría en 1080p, por lo que no se da el salto a QHD -lo que resta definición pero no abusa del consumo-. Además, se ha confirmado por parte del CEO de la compañía que el panel seguirá siendo Optic AMOLED, pese a los problemas de suministros que se han encontrado ocasiones.
Bien actualizado en el software
Esto lo decimos debido a que el sistema operativo que utilizaria el nuevo OnePlus 3, que todo apunta que será el mes que viene cuando sea presentado, es Oxygen OS, una personalización (fork) basado en Android 7.0, por lo que sería de los primeros en el mercado en dar uso a esta versión del desarrollo de Google y, por lo tanto, supondría un interesante golpe de efecto.
Además, y como es lógico pensar, se incluirían mejoras en algunos componentes esenciales. Por ejemplo, el procesador integrado será un Snapdragon 821 que mejora el rendimiento en casi un 10% sin problemas de temperatura (siempre que sea la versión que trabaja a 2,4 GHz, ya que hay otra que se mantiene en la misma frecuencia que el 820 y, por lo tanto, la ganancia es menor. La RAM, por su parte, seguirá en los 6 GB ya que no es necesario dar un paso aquí.
Lo cierto es que, manteniendo el diseño metálico, el OnePlus 3T parece un avance adecuado para mantenerse como una opción extremadamente válida en el mercado de gama alta y no quedarse atrás respecto a la competencia (además, se aprovecharán bien las fechas navideñas). Sea como fuere, parece que en no mucho se tendrá un nuevo modelo de esta compañía que, si las cosas no cambian mucho, tendrá un precio por debajo de los 400 euros.