Del éxito a su fin: así ha pasado Blackberry por los smartphone
No ha pillado a nadie por sorpresa, pero la canadiense anteriormente conocida como Research In Motion (RIM), y después BlackBerry, finalmente ha anunciado que abandonará la fabricación de teléfonos inteligentes licenciando su marca y enfocándose al software y los servicios. Algo que llega después de haberse sumado a Android como último intento por salvarse, y mucho después de haber abandonado su nicho de negocios para abrirse a un público de consumo mucho más amplio, cuando se produjo el 'boom' de la compañía. ¿Cómo ha llegado BlackBerry a su fin? Estos han sido sus pasos más destacables en el mundo de los smartphone.
BlackBerry apostó (casi) antes que nadie por el correo electrónico en el teléfono móvil a través de Internet WAP
Antes de la popularización del acceso a Internet desde los teléfonos móviles, BlackBerry se apuntó a las redes de primera generación apostando por el Internet vía WAP e introduciendo en estos dispositivos la mensajería a través de correo electrónico. En este campo, el del email, BlackBerry despuntó por permitir la escritura más rápida a través del teclado QWERTY completo, y con una pequeña rueda de navegación propia de los portátiles de aquella época, e incluso algo anteriores.
En estas fechas, todavía los dispositivos PDA no habían nacido. Y fue algunos años después, con la llegada de la segunda generación de redes móviles, cuando Microsoft apostaría con fuerza por dispositivos de este formato de la mano de Windows Mobile, y BlackBerry empezase a tomar forma con productos planteados para la productividad. Más adelante se introducirían los equipos con pantalla a color y prestaciones superiores, en torno al año 2003, con conectividad WiFi y Bluetooth desmarcándose del liderazgo de equipos más simples por parte de Nokia.
El teclado QWERTY físico y las posibilidades de conectividad fueron clave en el éxito de BlackBerry en el sector empresarial
Se abandonó el perfil empresartial cuando, en el año 2004, Research In Motion comenzó a liderar el sector con dispositivos como las Curve o Pearl, más accesibles en precio y con una interfaz mucho más cercana a la que actualmente ofrecen los teléfonos inteligentes. Y como puntos clave se mantuvieron el trackball y el teclado QWERTY completo. Fue cuando se alcanzaron las mejores cifras de ventas y su máximo valor en Bolsa, incluso hasta los años 2006 y 2007, cuando Apple y Google lanzaron sus apuestas en el sector de la telefonía inteligente con los sistemas operativos iOS y Android.
En los años siguientes, tanto Android como iOS apostaron por pantallas de mayores dimensiones, táctiles, y teclado 'embebido' en él, con interfaces mucho más capaces y unas prestaciones superiores a todos los niveles. La BlackBerry Torch, que cedió a este formato de interacción y hardware, ya supuso problemas en las cuentas de la compañía canadiense por la falta de adaptación por parte de la interfaz táctil, y por la falta de aportaciones por parte de los desarrolladores de aplicaciones, más inclinados especialmente hacia el iPhone.
Android y iOS (iPhone) cambiaron la forma de interacción en favor de las pantallas táctiles llamando la atención de consumidores y desarrolladores
A partir de estos años, BlackBerry ha seguido intentando defender su planteamiento y apuesta por el teclado QWERTY completo, con un sistema operativo sin apoyo alguno por parte de desarrolladores, y sin una interfaz adecuada a sus competidores. Los precios se han mantenido siempre por encima de alternativas Android, y aunque se ha tanteado durante los últimos años el soporte para aplicaciones desarrolladas para el sistema operativo móvil de Google, no ha sido suficiente.
De hecho, los últimos pasos de BlackBerry han pasado por ceder a la pantalla táctil y el abandono del QWERTY físico. E incluso sumarse al sistema operativo Android, pero siempre apostando por precios muy similares a las opciones más reconocidas del mercado, como el iPhone o el Samsung Galaxy de su misma generación. Quizá haberse sumado a Android desde el primer momento y ofreciendo sus ventajas en el entorno empresarial, o haberse sumado tarde como hicieron y haber competido con precios más interesantes habrían podido salvar a la firma, pero finalmente la fabricación de dispositivos se ha abandonado.