_
_
_
_

Evita que tu PC se caliente colocando en él monedas de diez céntimos

Tanto en ordenadores portátiles como en sobremesa, aunque con mayor frecuencia en los primeros, es frecuente que la temperatura suba de manera considerable cuando se exige un alto rendimiento o, sencillamente, se hace un uso prolongado y las condiciones de temperatura ambientales no favorecen que se mantenga templado. Esto afecta sobre el rendimiento, y en algunos casos puede provocar reinicios o, sencillamente, la necesidad de apagar y esperar a que todo vuelva a la normalidad. Sin embargo, hay un pequeño truco que puede solucionar estos problemas.

Las monedas de cobre pueden actuar como disipador en cualquier ordenador, así es como ayudan a reducir la temperatura de sus componentes

Más información
Bloquea el teclado y el ratón cuando no estás en el ordenador
Cómo configurar Remote Play en PC y Mac para el 'Uso a distancia' de PS4
La última actualización de Windows 10 provoca lentitud en el PC

En el caso de los ordenadores de sobremesa, sobre el procesador va incorporado un componente que se denomina disipador, y que tiene una forma similar a la de un radiador, está construido en cobre, y junto al ventilador ayuda a que la temperatura se reduzca. ¿Por qué? Porque el cobre tiene unas propiedades mejores que el aluminio y otros metales en estos términos, y es capaz de regular de mejor manera las temperaturas elevadas. Ahora bien, en los ordenadores portátiles no es frecuente encontrar un componente de este tipo.

Un usuario chino ha sorprendido en las redes sociales ha sorprendido a medio mundo convirtiendo monedas de cobre en un disipador casero. Sencillamente, colocándolas apiladas sobre la zona de ventilación de su ordenador portátil, y demostrando que de esta manera se puede bajar de forma considerable la temperatura hasta niveles óptimos, porque así es como se evita el calentamiento de los componentes internos.

En nuestro caso, en la moneda europea tenemos las de diez, veinte y cincuenta céntimos, con una aleación en la que el cobre supone el 88% de su composición. Estas, respecto a las monedas de uno, dos y cinco céntimos, tienen mejores propiedades para actuar como disipador, y también son mejores que las de uno y dos euros, precisamente por su composición metálica, en la que el cobre es la mayor parte de la aleación.

Archivado En

_
_