El Bluetooth será cuatro veces más rápido muy pronto
Las tecnologías de conectividad inalámbrica, Bluetooth y WiFi, están evolucionando de forma paralela en una carrera por el liderazgo en el campo del Internet de las Cosas. Más allá de los wearables, que ya han nacido y se han desarrollado en sus primeros años de la mano del Bluetooth 4 y sus especificaciones de bajo consumo energético, el próximo reto es prestar mayor velocidad y ancho de banda en múltiples conexiones simultáneas, e incluso reducir aún más el consumo por la conexión sin cables. Y para eso, el Bluetooth 5.0 es lo próximo que llegará.
El Bluetooth 5.0 consumirá aún menos energía al conectar múltiples dispositivos, y será cuatro veces más rápido en transferencias
Una de las mayores limitaciones de la actual tecnología Bluetooth, o más bien el estándar actual, es precisamente la velocidad. El máximo actual está fijado en 24 Mbps, mientras que los estándares WiFi superan ampliamente esta cifra, e incluso 1 Gbps por la combinación de bandas y la utilización de señales más potentes. Sin embargo, según ha adelantado el Bluetooth SIG, organismo encargado de la estandarización de la tecnología de conectividad Bluetooth, la próxima generación alcanzará los 100 Mbps.
El punto clave en el desarrollo del Bluetooth, desde el prisma de los wearables, es permitir unas prestaciones similares pero reducir de forma considerable el consumo energético. Y es que, por el momento, aunque el Bluetooth 4.2 LE ya es más eficiente que tecnologías anteriores, sigue suponiendo una traba para la autonomía de los relojes y pulseras inteligentes. Y de forma paralela, el Internet de las Cosas es el otro gran horizonte de la conectividad inalámbrica tipo Bluetooth.
No sólo se pretende mejorar la velocidad máxima de transferencia, sino también la capacidad de conexión con múltiples dispositivos de forma simultánea. De esta forma, el Bluetooth sí podría plantearse, frente al WiFi Halow, como la tecnología clave en la conectividad de electrodomésticos y otros dispositivos electrónicos inteligentes. Bombillas, farolas y otros similares, próximamente, contarán con su propio procesador como los teléfonos inteligentes, para su control remoto desde dispositivos móviles.