Apple recurre a Samsung para la pantalla de sus iPhone
Samsung no sólo es uno de los fabricantes de teléfonos inteligentes más importantes, sino también de sus componentes. Porque, además de desarrollar sus propios dispositivos y venderlos bajo su marca, como hacen otros similares, la surcoreana también se dedica a fabricar componentes de hardware de este tipo de dispositivos para otras marcas como, entre otras, Apple. Actualmente, los procesadores de los teléfonos inteligentes iPhone y sus tabletas iPad, aunque diseñados por la propia firma de Cupertino, están fabricados por Samsung. Y próximamente, según un acuerdo, también las pantallas serán cosa de Samsung.
Samsuing y LG tienen las mejores pantallas para teléfonos inteligentes
Hay fabricantes con paneles a la altura de los que Samsung y LG fabrican, pero estas dos compañías surcoreanas tienen una capacidad de producción mucho mayor, y especialmente Samsung. Tanto una como otra han apostado, desde hace varios años, por la tecnología OLED y derivados que, frente a los IPS LCD que utilizan gran parte de los fabricantes, ofrecen importantes ventajas. Su diseño es más compacto porque no requieren una capa adicional de retroiluminación, sino que los propios píxeles emiten luz por sí solos. Por lo tanto, son más delgados y eficientes.
Apple tendrá que recurrir a Samsung para las pantallas de sus próximos iPhone
Según los informes más recientes, la firma de Cupertino se sumará a la tecnología OLED este mismo año, con el iPhone 7, y se desconoce de la mano de qué fabricante dará el paso. Sin embargo, se ha podido conocer que un acuerdo con Samsung les servirá, tras haber pagado 2.599 millones de euros, para contar con su suministro de pantallas OLED de 5,5 pulgadas durante aproximadamente tres años, y desde comienzos del próximo año 2017, luego poco tiempo después del lanzamiento del iPhone 7. Y sólo de 5,5 pulgadas, luego sólo para las versiones Plus.
En noviembre nos preguntábamos qué piezas del iPhone 6s son realmente de Apple, y lo cierto es que aunque todos los componentes son diseñados por la compañía de Cupertino, pocos son fabricados realmente por ellos, y el ensamblaje se lleva a cabo en China, principalmente en Foxconn. Ahora, además las pantallas también correrán a cargo de Samsung, como ya ocurría con el procesador o la memoria flash.
