El iPhone SE supera al iPhone 6s en las pruebas de rendimiento
El iPhone SE, de Special Edition -edición especial-, es el terminal más pequeño de Apple en el catálogo actual, y el más barato en la historia del fabricante de Cupertino. Ahora bien, según las primeras pruebas de rendimiento con el software AnTuTu, especializado en cuantificar la potencia de los teléfonos inteligentes, es también el más potente. Gracias a una combinación de hardware casi idéntica, el pequeño de los iPhone se ha posicionado, en términos de rendimiento, por encima del iPhone 6s lanzado el pasado mes de septiembre junto al iPhone 6s Plus.
Su procesador no es más potente, ni la unidad de procesamiento de gráficos, ni su memoria RAM. En este sentido, hereda exactamente el mismo conjunto con el chip Apple A9, la PowerVR GT7600 y los 2 GB de memoria RAM. Sin embargo, difiere en un punto importante, que es la pantalla. Por ser más pequeña y de menor resolución que ambos dispositivos de última generación, tanto el iPhone 6s como el iPhone 6s Plus, hay algunas ventajas que le permiten a su hardware funcionar con 'mayor soltura'.
Su procesador, y otros componentes internos, son igual de potentes pero ofrecen mayor rendimiento
En el caso del iPhone 6s, todos los componentes internos trabajan en base a contenidos que se muestran en pantalla con una resolución de 1920 x 1080 píxeles, mientras que en el iPhone 6s los contenidos se escalan a 1334 x 750 píxeles. Un menor trabajo del procesador y la memoria RAM, y sobre todo de la GPU, es requerido para mostrar los contenidos en una pantalla de sólo 1136 x 640 píxeles del iPhone SE.
¿Quiere decir esto que es más rápido? No debería sino ser más 'ágil', y con una diferencia mínima, al procesar cualquier tipo de contenido gráfico en dos y tres dimensiones. Mientras que en aplicaciones regulares no es un cambio notable de rendimiento, sí puede marcar ligeras diferencias en los videojuegos más exigentes, sencillamente en la estabilidad a una alta velocidad de 'frames por segundo'. Y por supuesto, es una ligera mayor garantía de rendimiento a medida que evolucione iOS y las aplicaciones desarrolladas para su sistema operativo móvil. Pero las diferencias, en cualquier caso, son apenas notables sobre el papel, menos aún en la experiencia de uso.