Cómo reducir el consumo del PC para ahorrar en la factura de la luz
No es una nevera. Tu ordenador tiene un consumo de energía reducido si lo comparamos con algunos electrodomésticos de casa. Sin embargo, los dispositivos más potentes, y sobre todo los menos antiguos, no pueden precisamente presumir de eficiencia energética. Y si a esto le sumamos una mala configuración, ya tenemos la ecuación perfecta para despilfarrar unos euros que, mes a mes, acabaremos notando en la factura de la luz. Con estos sencillos trucos que te proponemos, que te van a hacer gastar apenas unos minutos, fácilmente vas a ahorrar en la factura de luz.
La pantalla apagada, siempre que sea posible y no la utilices
Vale que un salvapantallas va a darle un toque de personalización a tu ordenador, pero es un gasto innecesario de energía. Ni el salvapantallas, ni dejar la pantalla encendida, te van a ayudar a ahorrar energía. Siempre que sea posible, apaga la pantalla para ampliar su vida útil y, como estamos intentando conseguir, ahorrar algo de energía.
Si no vas a usar el PC, deja que descanse con los modos dedicados
Sea el sistema operativo que sea, tu ordenador cuenta con opciones de suspensión e hibernación, una forma de reducir de forma notable el consumo de energía en reposo y, sin embargo, mantener el PC listo para seguir con tus tareas tan pronto como te sientes frente al monitor. Cuando no vayas a utilizarlo, aunque sean apenas unos minutos, es recomendable utilizar estas opciones, incluso programar su activación automática.
Tu memoria consume demasiada energía
No es algo que muchos usuarios contemplen y, sin embargo, es uno de los factores más importantes. La memoria del ordenador, y nos referimos al disco duro, utiliza sistemas mecánicos que requieren más energía que un SSD. Cambiar el componente en favor de una unidad de estado sólido puede requerir un pequeño desembolso, pero vas a ganar en velocidad y eficiencia energética.
No mires sólo a tu ordenador, revisa también los periféricos
Todos esos periféricos que conectas al ordenador, como el ratón o un disco duro externo, aprovechan -casi todos- el propio ordenador como fuente de alimentación. No es cuestión de comprar componentes que se conecten directamente al enchufe, sino de mantener este tipo de alimentación, pero aprovechándonos de componentes más eficientes.
Otras formas de ahorrar energía con tu ordenador
En las Opciones de energía de tu ordenador puedes encontrar ajustes de rendimiento para regular en qué medida se permite al PC ofrecer la máxima potencia. Si utilizas una configuración de este tipo, vas a tener tu ordenador siempre dispuesto a hacer funcionar los programas más pesados, pero funcionando a un rendimiento superior al que necesitas la mayor parte del tiempo, y consumiendo recursos innecesarios. Por supuesto, mantener un volumen y brillo bajo te van a ayudar, en un sobremesa y un portátil, a que el consumo de energía sea más contenido.