Probamos el iPhone 6s, lo mejor y lo peor del nuevo móvil de Apple
Como es habitual, los nuevos terminales de Apple son muy esperados. Nos referimos a los modelos que son parte de la gama de producto iPhone 6s, que todavía no están a la venta en España pero que la propia compañía de Cupertino ha comunicado que esto será posible hacerlo el próximo día 9 de octubre. A la espera de que esto ocurra, os vamos a indicar lo mejor y los peor que se ha comprobado que ofrece el nuevo teléfonos de Apple (el que tiene pantalla de 4,7 pulgadas).
Para empezar, hay que indicar que el diseño del nuevo iPhone 6s permanece prácticamente invariable, con las líneas redondeadas en los laterales que son totalmente reconocibles y el aluminio como material de fabricación (que es más resistente, por cierto, pero que sigue siendo tan propenso a las ralladuras como es ya casi un clásico en los modelos de este fabricante). Por cierto, hay que recordar que hay un nuevo color disponible, el Rose Gold, que es el que por el momento más demandado está siendo.
Un detalle a valorar es que los nuevos iPhone 6s son algo más gruesos y pesados que la generación anterior, lo que se debe a la inclusión de un hardware más potente y que permite más funciones. Evidentemente esto no hace que hablemos de un “ladrillo”, pero varía la tendencia habitual de mejorar este apartado con el lanzamiento de nuevos modelos. En definitiva, estamos ante un teléfono altamente reconocible debido a que no hay grandes cambios estéticos y que permite una manipulación más que correcta con una mano, ya que es cómodo.
Hardware, la gran diferencia
Pues sí, lo cierto es que se ha avanzado en este apartado y las sensaciones que esto permite son buenas. Por ejemplo, el nuevo procesador Apple A9 demuestra que es potente, en especial en el trabajo por cada uno de los núcleos que tiene, y la experiencia al utilizar el sistema operativo iOS 9 es buena (se nota que este desarrollo está pensado por y para el iPhone 6s). Además, la RAM ahora es de 2 GB, por lo que el trabajo en condiciones de multitarea no se resiente, pese a que Siri ahora está siempre escuchando. En definitiva, el uso del teléfono es tan satisfactorio como de costumbre, y el “lag” brilla por su ausencia.
La pantalla no sufre cambio alguno respecto al iPhone 6 desde el que evoluciona este modelo, ya que se queda en las mismas dimensiones que hemos comentado antes (hay un phablet con 5,5 pulgadas) y la resolución continúa siendo de 1.334 x 750, lo que deja una densidad de píxeles de 326 ppp. Esto permite una buena visualización del panel, que por cierto tiene unos marcos más grandes de lo deseable, y consigue que se contenga el consumo y que el procesador no sufra al tener que gestionar su GPU imágenes muy grades (2K, por poner un ejemplo).
Aquí, en la pantalla, llega uno de los grandes añadidos del nuevo iPhone 6s: la tecnología 3D Touch que permite reconocer la presión que se hace en la pantalla. Lo cierto es que funciona realmente bien, ya que el sistema optativo detecta a la perfección esto. De esta forma, se pueden establecer acciones más precisas y diferenciadas, pero la implementación real llegará cuando los desarrollos de terceros (aplicaciones) saquen partido a esta opción de forma generalizada. Un ejemplo de lo que decimos es Twitter, que ya permite esto y funciona realmente bien. Esto es de lo mejor del nuevo iPhone 6s.
Cámara y otras cuestiones
La cámara principal también ha saltado a un escalón superior, ya que su sensor ahora es de 12 megapíxeles, en vez de ocho. Sobre el papel esto tiene que ser algo positivo y que se debería notar, pero al utilizar este componente al hacer fotos lo cierto es que no se notan grandes mejoras en lo que se refiere calidad y enfoque. Hay un mejor tratamiento de la luz y el post-procesamiento es tan bueno como es costumbre en los terminales de Apple, pero se debería notar algo más (aparte de una distancia de enfoque menor, por ejemplo). Por cierto, en la grabación 4K se nota mucho más “grano” del esperado, lo que resulta sorprendente.
La cámara para selfies también salta en su señor, siendo ahora este de 5 Mpx. Esto permite hacer tomas de mayor calidad con una gestión de la luz superior y con menos ruido en los resultados finales. Aquí si hay mejora evidente en el nuevo iPhone 6s.
También se nota de forma clara que el lector de huellas es mucho más rápido y eficiente al utilizarlo, por lo que se avanza en este apartado y, de esta forma, el iPhone 6s sigue siendo de lo mejor que hay en el mercado en este apartado concreto. Recordamos que este está situado en el botón Home.
Un detalle antes de finalizar es comentar que la batería ha reducido su carga, lo que en un principio se puede esperar que repercuta en la autonomía. Después de utilizar el terminal se ha comprobado que esto no es así, y que el tiempo de uso es similar al iPhone 6. Esto se debe a una optimización de recursos y que el sistema operativo se ha depurado mucho. Además, la recarga es más rápida, como es lógico.
Si deseas conocer todos los detalles de la prueba en concreto, imágenes que se han publicado y sensaciones ampliadas que se han obtenido del iPhone 6s, puedes hacerlo en este enlace de ADSLZone.