Consejos para fotografiar el eclipse solar del 20 de marzo
Uno de los fenómenos más impactantes que ofrece la naturaleza es un eclipse anular de Sol, un momento en el que la Tierra prácticamente se queda a oscuras debido a la sombra proyectada de la Luna, que se interpone en el camino de la luz que recibimos. Grupos de astronomía y otras asociaciones ofrecen todos sus medios para que cualquier persona pueda ver el eclipse sin ningún riesgo desde puntos estratégicos de las ciudades pero, ¿qué podemos hacer si queremos fotografiar por nosotros mismos el eclipse? En este caso, claro está, hablaremos de cómo realizar el proceso en una cámara réflex puesto que en las cámaras digitales sin visor no es necesario “mirar” al Sol, sino tan solo comprobar que la pantalla está bien dirigida hacia la imagen.
Lo primero que debemos tener en cuenta que la observación solar a través de elementos ópticas es realmente peligrosa y obviamente esto implica también a la fotografía. Es decir, nunca debemos mirar a través del visor directamente hacia el sol, ni siquiera en un eclipse, puesto que los rayos siguen llegando y pueden llegar a quemarnos la retina. Teniendo esto en cuenta, existen varias alternativas para realizar este proceso con seguridad.
Algunas marcas de fotografía venden filtros especiales de densidad neutra opacos a la vista con los que se puede fotografiar sin problema alguno el Sol, pero otros fabricantes no, por lo que hemos optado por ofrecer una solución intermedia. Como hemos dicho lo más importante es un filtro y para ello tenemos la opción de los filtros recortables. Si compramos algún filtro UV sencillo en cualquier tienda online tipo eBay, podemos utilizar el soporte para incorporar una lámina Mylar o Baader, que pueden encontrarse fácilmente en tiendas como Amazon en formatos de 20x30 centímetros por un precio de unos 25 a 30 euros. Así, con el soporte anterior, podemos cortar a medida el trozo que necesitamos para nuestro objetivo y que incorporaremos al mismo soporte del filtro UV, uniendo ambos (las láminas son algo así como el aluminio, de aspecto muy fino y fácilmente maleable). Como es de esperar, este método debe realizarse con total cuidado para no dejar ningún poro ni ninguna zona sin cubrir ya que los rayos solares podrían provocar daños irreparables en nuestros ojos.
Ahora bien, ¿y la fotografía en sí? ¿Qué parámetros deben utilizarse? Como se trata de un día soleado en realidad, lo recomendable es una velocidad de obturación alta, alrededor de los 1/800 segundos y una apertura media o baja, es decir, un número f más alto (hablamos de objetivos convencionales que todo el mundo tiene, es decir, de unos 35 mm) para captar correctamente la luz. No obstante, estas directrices variarán dependiendo de las nubes que nos acompañarán el 20 de marzo, lo que provocará que sobre todo disminuyamos la apertura del diafragma.