Los problemas de deformación en los iPhone 6 podrían estar resueltos
Apple estaría ya resolviendo la debilidad de los iPhone 6 y su tendencia a deformarse bajo cierta presión. Se han identificado evidencias en nuevos terminales de la compañía que corregirían de forma sutil los problemas registrados, mejorando aspectos como la densidad del metal de su carcasa.
El estreno del iPhone 6 y del iPhone 6 Plus estuvo marcado por el conocido caso 'Bendgate'. Algunos usuarios denunciaron problemas de deformación en sus dispositivos después de someterlos a cierta presión. Las pruebas demostraron que sí se daban ese tipo de deformaciones, aunque no en una magnitud tan elevada como se difundió en un principio.
Dado que los iPhone 6 presentaban ese problema, se esperaba que Apple reaccionase. La compañía ha mantenido una política discreta en este sentido y no ha compartido sus planes sobre una solución para la incidencia. Las ventas de los iPhone 6 se han mantenido a un altísimo nivel y la cuestión no ha ido más allá. Sin embargo, parece que Apple no ha dejado el problema en el olvido y lo estaría resolviendo de forma discreta.
Los primeros detalles sobre esa búsqueda de soluciones se han dado a conocer a través de un usuario que ha adquirido una unidad de iPhone 6 y lo ha podido comparar con otro comprado en el inicio de sus ventas. En sus comentarios en Reddit se señalan algunas diferencias y evidencias que apuntan directamente al trabajo de Apple para solucionar la incidencia.
En primer lugar, parece que el dispositivo ofrece una mayor resistencia ante la presión, simplemente con pruebas directas. El usuario ha encontrado una mejor respuesta del dispositivo a simple vista, un hecho que ha motivado la realización de más pruebas.
Más densidad y refuerzos
Al investigar la composición del nuevo iPhone adquirido, el usuario en cuestión ha encontrado más diferencias. Por ejemplo, gracias a una revisión al microscopio ha identificado una mácula roja en una de las partes más vulnerables del dispositivo. Se trataría de la zona debajo del botón inferior de volumen, que ya había sido señalada como el punto menos protegido del dispositivo.
Se trataría de un pequeño refuerzo que impediría que esa zona del iPhone 6 sea frágil y pueda permitir que el dispositivo se doble al recibir presión. Se trataría de una medida imperceptible para los usuarios, pero efectiva para evitar problemas.
Tras comprobar ese detalle, un análisis del material metálico parece incidir en la idea de que Apple ha buscado una solución. En concreto, la densidad del metal sería superior, lo que incidiría en su rigidez y en su resistencia. Así, los iPhone 6 que se estarían enviando contaría con más resistencia y terminarían con el 'bendgate'.
Otro elemento que se ha presentado como una confirmación de estos cambios ha sido el cambio en el peso del dispositivo. El usuario en cuestión ha explicado que el nuevo terminal comprado tiene un peso con 21 gramos más. Ese aumento podría estar justificado por el uso de un metal más denso, pero no hay confirmación. También podría deberse a que tiene más capacidad de almacenamiento, de manera que no es un dato definitivo. Lo que parece claro es que Apple está trabajando en el 'bendgate' y que lo está haciendo con su discreción tradicional.