Consejos y herramientas para proteger a los menores de contenidos violentos o sexuales en Internet
Muchos padres están muy preocupados, y no les falta razón para ello, por lo que ven y por donde navegan unos niños que, en muchas ocasiones, superan en conocimientos tecnológicos a sus progenitores. Estos no ven otro medio que desconectar a sus vástagos de las redes sociales y limitar el uso de Internet bajo estricta supervisión pero la realidad es que ese tampoco es el camino.
El mundo, por mucho que nos pese, es ya tan digital como físico y hoy en día aislar a un niño de ese mundo es hacerle un flaco favor para el futuro. No quiere decir eso que se les tenga que dejar vía libre, desde Kaspersky, quienes hacen poco realizaban un estudio de los contenidos indesados a los que accedían más habitualmente los menores den entre 11 y 14 años, como recogen en Europapress, da una serie de consejos que completamos con alguna herramienta interesante para proteger a los niños a la vez que se les permite disfrutar del ciberespacio y hasta de las redes sociales.
Prohibir "Internet" no es la solución
Kaspersky, como primera recomendación, aconseja no prohibir las redes sociales. Es inevitable que el círculo de amistades de los niños esté en ellas y acabarían accediendo a escondidas, lo que es aún más pernicioso. Por otra parte, la Ley española establece que los menores de 14 años de edad no pueden tener una cuenta en redes como Facebook o Twitter.
Los ajustes de control parental están para usarlos
La segunda recomendación es la de utilizar las herramientas de control parental que todos los dispositivos poseen. Ya sea en el ordenador, la smartTV, el móvil, mediante sistemas como el Kids Mode de Samsung, o hasta en las vidoeconsolas, todos y cada uno de los dispositivos conectados a internet tienen métodos para restringir el acceso de los menores a ciertos contenidos sin una contraseña paterna. En el caso de los smartphones y tablets es donde está más desarrollado, el Kids Mode antes mencionado, permite incluso establecer en el propio dispositivo paterno una serie de controles para que el menor no pueda acceder a cosas como ciertas aplicaciones o funciones del terminal sin supervisión, pero pudiendo utilizar el resto sin problemas.
El menor debe concienciarse de la importancia de su privacidad online
Es importante el trabajo educativo en casa en torno a la privacidad. El primer paso para proteger a los niños y adolescentes es hacerles ver, sin por ello castigarles, que son los primeros responsables de los contenidos que publican y serán los que reciban las consecuencias. Direcciones, telefónos o cualquier otro tipo de contenido, incluyendo cosas como la geoetiquetación de las fotos que permitiría encontrarles, hay que mostrarles cómo deben ocultarlo y cuando no deben compartirlo.
Usar herramientas de monitorización, pero de forma consensuada en la famillia
Finalmente, Kaspersky aconseja llegar a acuerdos justos con los menores. En la mayoría de las ocasiones, sobre todo en el caso de los adolescentes y las redes sociales, estos tratarán por todos los medios, y lo conseguirán, de mantener fuera de sus círculos a sus padres.
En este sentido, es interesante buscar una buena herramienta de control parental. Pero no desde la óptica "policial", sino que su uso se debe consensuar con el menor y mostrarle cómo con ella se protegerá su esfera privada y al mismo tiempo son una forma útil no sólo para dar tranquilidad a los padres, sino para su propia seguridad en Internet ante casos de acoso.
De entre los cientos de soluciones que hay, una de las más interesantes y recomendables podría ser Qustodio, tanto por la amplitud de las plataformas en las que se puede aplicar como por los diferentes niveles de privacidad y monitorización que ofrece. Se puede decir que es universal ya que tiene soporte para Windows, Android, iOS, MacOS y hasta para dispositivos Kindle de Amazon.
Con esta herramienta se pueden bloquear contenidos peligroso y páginas web, gracias a su análisis en tiempo real, tener un control sobre la actividad social del menor, establecer tiempos de uso, controlar qué juegos online y aplicaciones se utilizan, mantener geolocalizado al menor e incluso saber con quien habla o se envía mensajes. Todo ello con un panel de control multiusuario y multidispositivo y, además, es gratuito aunque con ampliaciones de pago que van de los 30 a los 5o euros al año.