Un Fannie Mae en la UE es una mala respuesta a una buena pregunta
La idea de un organismo para trocear las hipotecas y apoyar la financiación verde y digital no debería prosperar
La Unión Europea busca fórmulas para financiar la transición ecológica e impulsar las inversiones digitales. Un nuevo informe dirigido por el exgobernador del Banco Central francés Christian Noyer, que cifra el gasto necesario en cerca de 1 billón de euros al año, considera que impulsar el uso de la titulización por parte de los bancos podría ayudar. Tiene razón, pero la propuesta de crear una versión europea de Fannie Mae y Freddie Mac no debería prosperar.
El ex primer ministro italiano Enrico Letta instó a la UE, en un informe de abril sobre ...
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La Unión Europea busca fórmulas para financiar la transición ecológica e impulsar las inversiones digitales. Un nuevo informe dirigido por el exgobernador del Banco Central francés Christian Noyer, que cifra el gasto necesario en cerca de 1 billón de euros al año, considera que impulsar el uso de la titulización por parte de los bancos podría ayudar. Tiene razón, pero la propuesta de crear una versión europea de Fannie Mae y Freddie Mac no debería prosperar.
El ex primer ministro italiano Enrico Letta instó a la UE, en un informe de abril sobre cómo mejorar el mercado único del bloque, a mejorar su marco de titulización para que sea más fácil de utilizar y más eficaz. En las conclusiones de una cumbre celebrada los días 17 y 18 de abril en Bruselas, los líderes de la UE abogaron por “relanzar el mercado europeo de titulización, incluso mediante cambios normativos y prudenciales, utilizando el margen de maniobra disponible”
El ministro francés de Economía, Bruno Le Maire, pidió a Noyer que ideara formas de impulsar los mercados de capitales de la Unión Europea. Entre otros colaboradores figuran ejecutivos de Euronext, BNP Paribas, Amundi y AXA, así como representantes del Banco Europeo de Inversiones y la autoridad francesa de normas contables.
El grupo recomendó el 25 de abril la creación de un organismo europeo que ayude a trocear las hipotecas. Su informe aboga por que los bancos descarguen activos relativamente homogéneos, como los préstamos residenciales, en un fondo común que se beneficiaría de las garantías de los Gobiernos nacionales, como hacen los gigantes inmobiliarios estadounidenses. A continuación, los bancos canalizarían esos activos hacia un organismo paneuropeo que agruparía los préstamos nacionales en valores y los vendería por tramos a inversores como fondos de pensiones.
Es cierto que los mercados europeos de titulización están moribundos desde 2008, lo cual, dado lo endeble de sus mercados de capitales, hace que la UE dependa de su sistema bancario para obtener financiación privada. Si entidades como Deutsche Bank y BNP Paribas pudieran agilizar sus balances fraccionando más préstamos y vendiéndolos, tendrían más margen para financiar parques eólicos, centros de datos y otros proyectos. Según el informe Noyer, un mercado de titulización plenamente operativo en la UE podría aumentar los préstamos bancarios en un 26%.
Pero replicar a Fannie y Freddie en las tierras europeas podría distorsionar los precios de las hipotecas o algo peor. El dúo está bajo control gubernamental desde el colapso financiero de 2008, una crisis a la que contribuyeron y por la que tuvieron que ser rescatadas por los contribuyentes. Incluso si fuera deseable construir una versión europea de esos controvertidos gigantes, podría no ser posible dada la fragmentación política. Si las garantías estatales previstas por el plan de Noyer procedieran de los Gobiernos nacionales y carecieran de límites, los megabancos de grandes economías como Alemania y Francia podrían dominar, y lo cual socavaría el mercado único. Si, por el contrario, las garantías estatales acabaran siendo mutualizadas, se cruzaría una línea roja para los conservadores en fiscalidad.
Hay otras formas de impulsar los préstamos titulizados. El Banco Central Europeo pidió en marzo que se revisaran los requisitos para contabilizar estos activos en los balances bancarios, una idea que también se menciona en el informe Noyer. Algunos banqueros dicen a Breakingviews que un programa más modesto respaldado por el Estado y centrado en préstamos a pequeñas y medianas empresas podría ser más factible. No tendría el atractivo del big bang francés. Pero la reactivación de los mercados europeos de capitales requiere objetivos alcanzables, no solo grandes ideas.
Los autores son columnistas de Reuters Breakingviews. Las opiniones son suyas. La traducción, de Carlos Gómez Abajo, es responsabilidad de CincoDías
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