La UE ensucia la puja de Amazon por iRobot
Bruselas advierte de que podría ir contra la competencia, pero si el acuerdo fracasa, serán los accionistas de la empresa objetivo los que sufran
Los intentos de Amazon de engullir los robots aspiradores de iRobot corren el riesgo de dejar un desastre mayor. Más de un año después de que anunciara la compra por 1.400 millones de dólares, Bruselas ha advertido de que la operación podría cerrar la puerta a los rivales del fabricante de Roomba. Pero si el acuerdo fracasa, serán los accionistas de iRobot los que sufran una mayor presión a la baja.
La Comisión Euro...
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Los intentos de Amazon de engullir los robots aspiradores de iRobot corren el riesgo de dejar un desastre mayor. Más de un año después de que anunciara la compra por 1.400 millones de dólares, Bruselas ha advertido de que la operación podría cerrar la puerta a los rivales del fabricante de Roomba. Pero si el acuerdo fracasa, serán los accionistas de iRobot los que sufran una mayor presión a la baja.
La Comisión Europea, que está examinando el acuerdo junto con Reino Unido y EE UU, publicó el lunes sus objeciones. La primera es la preocupación por la posibilidad de que Amazon de un impulso a las ventas de Roomba haciendo que sus rivales sean menos visibles en su gigantesco mercado online. Si suena familiar, es porque los reguladores de la UE y EE UU ya han estado presionando a Amazon por lo que creen un trato anticompetitivo a los comerciantes independientes. En Europa, Amazon se ha comprometido a atenerse a ciertos comportamientos; en EE UU, los antimonopolio han interpuesto una demanda.
Aunque no hay un desglose claro de cuánta gente compra sus máquinas en Amazon, el 23% de los ingresos que iRobot dice que genera de un solo minorista es sugerente de su dependencia de una sola plataforma. En resumen: las objeciones de Bruselas se leen como un argumento en contra de permitir que Amazon posea cualquier negocio que venda productos a través de ella. Aunque el gigante podría prometer no impulsar específicamente las Roombas, quizá no sería suficiente.
iRobot cayó un 18% en Bolsa tras la noticia, hasta los 35 dólares, valor apenas inferior al de un mes antes de que, en 2022, Amazon se abalanzara con una oferta en efectivo de 61 dólares. Pero una iRobot independiente probablemente valdría mucho menos. Se prevé que las ventas caigan un 29% este año, dejándolas casi un 50% por debajo del nivel de 2021. El colapso ha dejado iRobot sangrando en efectivo y obligada a asumir un préstamo punitivo de Carlyle, lo cual permitió a Amazon recortar su oferta a 51,75 dólares. Si el gigante se ve frenado, los inversores prevén que iRobot caiga a 5-15 dólares. O sea: la cotización actual implica una moneda al aire de opciones de éxito. Amazon se ha comprometido por contrato a litigar en defensa del acuerdo y aún puede persuadir a los reguladores. Los inversores no tienen más remedio que tragárselo.
Los autores son columnistas de Reuters Breakingviews. Las opiniones son suyas. La traducción, de Carlos Gómez Abajo, es responsabilidad de CincoDías
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