Los riesgos de la industria del entretenimiento en 2023

El factor más importante es la inflación, que supone un aumento de los costes de producción y los eventos en directo

Cate Blanchett posa en la alfombra roja de la última edición de los Oscars.ERIC GAILLARD (REUTERS)

Tras un par de años de incertidumbre, el sector del entretenimiento vuelve a disfrutar de tiempos más felices, pero ¿qué hay de nuevo en el escenario mundial y cómo afectan las últimas tendencias a las perspectivas y al perfil de riesgo del sector? Si 2020 fue el año en que la música se detuvo, los cines se apagaron y los jugadores de fútbol marcaron goles en medio de un silencio ensordecedor o de ovaciones grabadas, el sector del entretenimiento espera que 2023 sea el año en que por fin pueda recuperar la experiencia colectiva de salas llenas, cines abarrotados y estadios en auge.

A pesar de los vientos en contra, los consumidores vuelven a sus lugares o plataformas de entretenimiento favoritos registrando cifras alentadoras. Así, la taquilla mundial alcanzará los 25.900 millones de dólares en 2022, informa Gower Street Analytics, un 27% más que en 2021, pero todavía un 35% por detrás de la media de los tres años anteriores a la pandemia (2017 a 2019). Se espera que los ingresos de la música en directo superen los niveles anteriores a la pandemia en 2024, mientras que las suscripciones a la música digital en streaming impulsarán el crecimiento de la música grabada, cuyos ingresos se prevé que alcancen los 45.800 millones de dólares en 2026 frente a los 36.100 millones de 2021, según PwC.

Además, el teatro también está resurgiendo. En este sentido, la Asociación de Teatro de Londres informa de que la asistencia en 2022 aumentó un 7,21% y el aforo un 7,9% en comparación con 2019, mientras que los espectáculos de Broadway recaudaron 51,9 millones de dólares durante la última semana de 2022 en comparación con los 26,3 millones de la misma semana del año anterior.

También, el sector deportivo se está mostrando especialmente resistente. Fitch prevé una “leve recesión” en EE UU en el segundo trimestre de 2023, pero considera que los equipos mantendrán el crecimiento en asistencia e ingresos. Hay que tener en cuenta que, en comparación con otros sectores del entretenimiento, la industria mundial del deporte goza de un grado relativo de certidumbre gracias a los derechos de los medios de comunicación, los acuerdos de patrocinio y un calendario de eventos y torneos deportivos internacionales fijos.

El factor más importante es sin duda la inflación, que supone un aumento de los costes de producción y de los eventos en directo, así como un incremento de los costes de personal tras la escasez de personal cualificado que se produjo a raíz de la pandemia.

Además, el enorme volumen de contenidos que se crean y distribuyen en la actualidad hace que la calidad sea un factor diferenciador clave en un mercado saturado. Cabe destacar, también, que la tecnología ha reducido las barreras de entrada para los creadores de contenidos, cuando casi cualquiera puede publicar en TikTok, YouTube o Instagram.

Las conferencias virtuales son un área de especial crecimiento –no exentas de riesgos como fallos de transmisión debidos a fenómenos meteorológicos, catástrofes naturales, incendios que afecten a la unidad de transmisión o problemas de red que afecten a la infraestructura de transmisión–, igual que el streaming. El tamaño del mercado mundial de eventos virtuales se valoró en más de 114.000 millones de dólares en 2021 y se espera que crezca a una tasa de crecimiento anual compuesta del 21,4% de 2022 a 2030.

Si nos centramos en las grandes producciones cinematográficas, y más teniendo en cuenta la reciente celebración de la 95 edición de los Óscar, los estudios deben tener la seguridad de que su cobertura de seguro es suficiente. Así, a mayor coste mayor riesgo porque cada día de rodaje supone un gasto superior, que puede reflejarse en cualquier siniestro. Hay que tener en cuenta que los contenidos de alta calidad no son baratos, y cuando los costes de producción aumentan, también lo hacen los riesgos.

En la ceremonia de los Óscar de este año ha habido vestidos verdes en la alfombra roja, ya que la Academia se ha asociado con la organización de sostenibilidad RCGD Global, dirigida por mujeres, para fomentar un enfoque más responsable de la moda en los premios. Esta iniciativa refleja la creciente influencia de las cuestiones medioambientales, sociales y de gobernanza en el sector. En este sentido, la banda británica Coldplay se ha comprometido a reducir a la mitad las emisiones de carbono asociadas a su actual gira mundial Music of the Spheres, en comparación con 2016-2017, y ha asumido una serie de compromisos sostenibles como pagar un sobrecoste por el combustible utilizado en los aviones, abastecerse de mercancía ética y sostenible, y plantar un árbol por cada entrada vendida.

Las generaciones más jóvenes están especialmente preocupadas por la sostenibilidad, y los organizadores de festivales están respondiendo a ello. Por ejemplo, la empresa de entretenimiento Live Nation tiene una carta Green Nation con el objetivo de reducir las emisiones de carbono en un 50% para 2030.

Ahora que hemos vivido la crisis de la Covid-19, el sector del entretenimiento tiene que seguir vigilando sus protocolos de salud y seguridad, pues no sabemos si las pandemias serán más frecuentes ni cuándo podría producirse la próxima.

Igualmente, el cambio climático es otro motivo de preocupación ya que cada vez se producen más fenómenos meteorológicos anómalos como fuertes tormentas en Europa o incendios forestales en California, por ejemplo. Esto inevitablemente provoca contratiempos en los eventos en directo, tanto en términos de exposición a cancelaciones como de seguridad. La videovigilancia en tiempo real en grandes eventos es hoy una buena opción para mantener la seguridad de todos los participantes, al mismo tiempo que es indispensable supervisar las redes sociales para anticiparse a las avalanchas y evitar estampidas y revisar constantemente los procedimientos de seguridad para prever cualquier contratiempo.

Los resbalones y las caídas son la causa más común de siniestros en las pólizas de eventos en directo, por lo que los organizadores deben asegurarse de que haya personal médico y transporte a los centros médicos locales.

Gianluca Piscopo es Regional Managing Director para Ibero/LatAm de Allianz Global Corporate & Specialty (AGCS)

Sigue toda la información de Cinco Días en Facebook, Twitter y Linkedin, o en nuestra newsletter Agenda de Cinco Días

Más información

Archivado En