El bitcoin pulveriza sus máximos históricos para recibir a Trump
La principal criptomoneda superó este lunes los 109.000 dólares coincidiendo con la toma de posesión del republicano, y aguarda nuevos anuncios para continuar su despegue
La bienvenida del bitcoin a Donald Trump ha sido tan calurosa como cabía esperar. La principal criptomoneda se sumó este lunes a los festejos por la toma de posesión del nuevo presidente estadounidense con una fuerte revalorización, que le llevó a tocar máximos históricos más allá de los 109.000 dólares. El avance eleva hasta el 60% las ganancias del bitcoin desde su victoria electoral, y sitúa su capitalización de mercado en los 2,15 billones de dólares, solo por detrás del oro, Apple, Nvidia, Microsoft, Alphabet y Amazon en la lista de los activos más valiosos del mundo. Si se toma el valor del conjunto de las criptomonedas —respecto a las cuales el bitcoin representa el 57%—, la cantidad asciende a 3,72 billones, más que cualquier empresa cotizada.
En una jornada festiva para las Bolsas en Estados Unidos por la celebración del día de Martin Luther King, el bitcoin se ha erigido en el vehículo perfecto para canalizar la fe de los inversores en la nueva era que encarna Trump, sobre el papel mucho más amable con los mercados financieros. “Van a estar muy contentos conmigo”, dijo a los miles de entusiastas de las criptomonedas que acudieron el verano pasado a la conferencia Bitcoin 2024 celebrada en Nashville.
Las subidas del bitcoin solo se ha visto opacado por el lanzamiento de las criptomonedas $TRUMP y $MELANIA, que han rebasado los 10.000 millones y los 2.000 millones de capitalización de mercado respectivamente poco después de su aparición. La fiebre especulativa desatada por ambas fue de dimensiones tales que muchos inversores que lo pretendían fueron incapaces de adquirirlas, debido al colapso producido ante la avalancha de órdenes.
En el caso del bitcoin, el nuevo arreón de su cotización bebe de una certeza: con la llegada de Trump a la Casa Blanca, los potenciales anuncios favorables dejan de ser promesas de futuro para convertirse en realidades palpables que pueden materializarse en cualquier momento, por lo que aquellos criptocreyentes que no estaban invertidos, o bien tenían una posición inferior a la que deseaban, han querido subirse al barco antes de que zarpe, creándose alrededor del bitcoin el enésimo episodio del llamado FOMO (fear of missing out; en español, miedo a perderse algo).
Tras colocar en cargos de responsabilidad a personalidades abiertamente partidarias de las criptomonedas —entre ellos Paul Atkins, próximo presidente de la Comisión de Valores y Bolsa (la SEC, por sus siglas en inglés)—, y llevar a cabo promesas tan rimbombantes como la creación de una reserva estratégica de bitcoin, el mercado ve llegado el momento en que Trump pasará de las palabras a los hechos. En esa dinámica, la de actuar, encuadran también el citado lanzamiento de las criptomonedas meme de Trump y Melania, un gesto que provocó ciertas críticas en el sector porque compite con el resto, pero que de rebote está beneficiando al bitcoin, porque por más que sus mayores beneficiarios sean el presidente y su esposa, el hecho de que haya ocurrido a solo unas horas de sentarse en el Despacho Oval supone una señal de que la ligazón entre las criptomonedas y su Administración es sólida.
Especulación
El hecho de que Trump inicie su mandato con una nueva incursión en el universo cripto no solo es una rentable declaración de intenciones, también abre la puerta a que su legislatura se caracterice por un aumento de la volatilidad en el mercado de activos digitales. Mes y medio después de tocar la esperada cota de los 100.000 dólares, el bitcoin deambulaba sin rumbo a la espera de nuevos estímulos. Y ahora entran en juego las expectativas: la cotización ya descuenta el plan de crear una reserva estratégica o el citado cambio en la cúpula del regulador del mercado bursátil, y acumula un alza del 160% en 12 meses, por lo que Trump deberá esmerarse si quiere mantener la mecha encendida.
Uno de los puntos que se antoja clave será su relación con la Reserva Federal. Las incertidumbres sobre cómo de larga será la pausa de la Fed en los recortes de los tipos de interés puede pesar sobre el bitcoin, que como buen activo de riesgo ya sufrió durante el ciclo de subidas del precio del dinero. Aunque no tiene competencias sobre ello, Trump prometió en campaña llevar las tasas hacia abajo, por lo que no se descarta una colisión entre el nuevo presidente y Jerome Powell, jefe de la Fed.