Ferrovial ya negocia más en EE UU que en Holanda, pero sigue moviendo el 98% de sus títulos en BME
Su cotización en el Nasdaq muestra falta de liquidez y los analistas reconocen que ésta tardará aún en llegar
Los inversores ya negocian más títulos de Ferrovial en el Nasdaq que en Euronext Ámsterdam. Una semana después de que la concesionaria lograra debutar en la Bolsa estadounidense, cumpliendo así uno de los principales hitos marcados por su dirección, Ferrovial ya cruza más operaciones de compra y venta en la Bolsa estadounidense que en la holandesa, aunque la operativa en ambos mercados sigue siendo testimonial y los inversores siguen apostando de forma mayori...
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Los inversores ya negocian más títulos de Ferrovial en el Nasdaq que en Euronext Ámsterdam. Una semana después de que la concesionaria lograra debutar en la Bolsa estadounidense, cumpliendo así uno de los principales hitos marcados por su dirección, Ferrovial ya cruza más operaciones de compra y venta en la Bolsa estadounidense que en la holandesa, aunque la operativa en ambos mercados sigue siendo testimonial y los inversores siguen apostando de forma mayoritaria por el mercado gestionado por Bolsas y Mercados Españoles (BME).
Desde el pasado 9 de mayo, fecha en la que realizó el toque de campana en el Nasdaq y se convirtió en la primera empresa del Ibex 35 en negociar en la Bolsa estadounidense con sus acciones ordinarias y no a través de certificados de depósito (ADR), Ferrovial ha movido un total de 18,2 millones de acciones en la Bolsa española, frente a los 0,29 millones de títulos suyos que se han negociado en la Bolsa estadounidense y los 0,028 millones de Euronext Ámsterdam, donde cotiza desde junio del año pasado.
En dinero contante y sonante, los inversores han cruzado operaciones de compra y venta por 657 millones de euros en la Bolsa española, cuantía que se reduce sustancialmente hasta los 10,89 millones de euros del Nasdaq y a solo 0,9 millones en la Bolsa holandesa. El 98% de las operaciones con acciones de la empresa, pues, se celebran en lo que hasta hace poco más de un año, era el mercado doméstico para doméstico
Si bien la empresa dirigida por Rafael del Pino reconoció que la fragmentación de su cotización en tres plazas distintas podría afectar a la liquidez de sus títulos, en realidad la liquidez solamente es baja lejos de las cuatro Bolsas españolas. En particular, esta falta de liquidez es se aprecia en su negociación en el Nasdaq, donde el margen de precios (spread, en la jerga) –la diferencia entre el precio de oferta y demanda para un determinado valor- de sus acciones es amplio. Así, mientras que en BME el precio más alto que el comprador está dispuesto a pagar (bid) es solo dos céntimos más bajo que el precio más bajo al que el vendedor está dispuesto a vender (ask) -en la jornada del 14 de mayo se situaron en 36,56 y 36,58 euros, respectivamente, en el Nasdaq la diferencia es mayor: 38,73 frente a 40,5 euros.
Fuentes del mercado apuntan que cotizar en un mercado como Estados Unidos implica el acceso a una comunidad más amplia de inversores, además de elevar la visibilidad de la empresa y su liquidez, así como amplificar sus fuentes de financiación. Pero por el momento, esa liquidez aún tardará en llegar a su cotización estadounidense. Juan José Fernández-Figares, de Link Securities, estima que “tardará tiempo hasta que el mercado principal para las acciones de Ferrovial sea el Nasdaq. Es un proceso normal. De momento, la mayoría de los inversores interesados en el valor están en Europa”. Los inversores son reticentes a operar en mercados poco líquidos porque las mayores horquillas entre compra y venta encarecen las operaciones, y porque en caso de querer vender el riesgo de no obtener un buen precio es mucho más alto.
Entre los distintos argumentos que utilizó para justificar su decisión de cotizar en distintos mercados, Ferrovial destacó la capacidad para poder acceder a una base de inversores más amplia, ser incluido en índices bursátiles de EE UU -las empresas que cotizan allí con ADR no son elegibles-, y dar un paso más en su internacionalización, dado que más del 80% de su negocio se genera fuera de España y más del 90% de sus accionistas institucionales eran, a febrero de 2023, internacionales.
Fuentes cercana a la empresa llegaron a apuntar el año pasado que su debut en la Bolsa estadounidense aportaría una liquidez extra al valor de la compañía de entre 2.000 y los 5.000 millones de euros anuales. Una inyección condicionada, eso sí, a su inclusión en índices como el Nasdaq 100 o en algunas de las versiones del Russell y que, en el caso del primero aún tendrá que esperar. En la revisión anual del Nasdaq 100, que se produce en diciembre, prima la inclusión del valor en anteriores composiciones, lo que deja pocas plazas disponibles. Unos huecos en los que, a priori, tendrán prioridad grandes firmas como Arm y Supermicro.
Con todo, Ferrovial acumula un alza del 11,7% en lo que va de año y sube un 25,5% desde que debutara en la Bolsa holandesa. Una revalorización que se ve respaldada además por las firmas de análisis: el 52% aconseja la compra de sus títulos y un 32% mantiene un consejo de compra, con un precio objetivo medio de 39,3 euros por acción. Su valor en Bolsa supera los 27.300 millones de euros.
Total Energies estudia llevar su cotización principal a EE UU
La estampida de cotizadas europeas a Estados Unidos no hace más que crecer. La búsqueda de una mayor base inversora y mayor liquidez para sus títulos está llevando a un buen puñado de compañías a cotizar de forma exclusiva a EE UU o a llevar su cotización principal. La última que ha reconocido estar estudiándolo es la petrolera francesa TotalEnergies, que busca reducir su diferencia de valoración con sus competidores franceses, aunque con ello ha despertado los recelos de Euronext. Por el momento, la empresa está realizando un estudio para su viabilidad y prevé dar a conocer sus conclusiones en septiembre.
“Confío en que encontraremos soluciones técnicas para que Total siga cotizando donde hay liquidez”, ha apuntado esta semana el consejero delegado de Euronext, Stéphane Boujnah. Por su parte, el consejero delegado de la petrolera, Patrick Pouyanne, se ha defendido afirmando que “es una cuestión de negocios”. “Lo que observamos es que cada vez tenemos más más accionistas estadounidenses. Hoy solo podemos ofrecerles ADR y queremos ofrecerles acciones (ordinarias)”, ha comentado. TotalEnergies sigue los pasos dados meses atrás por firmas europeas como el gigante de materiales de construcción irlandés CRH, que en septiembre se despidió de la Bolsa de Dublín, donde cotizó durante 87 años, y llevó a Nueva York su cotización principal. Movimiento que replicará la papelera Smurfit Kappa tras su fusión con la estadounidense WestRock.
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