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En colaboración conLa Ley

Un verano de justicia para perfeccionar la formación de los estudiantes de Derecho

Universidades y despachos les abren sus puertas con programas pioneros y prácticas profesionales

Getty Images
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Saber de leyes no es saber de derecho. Para pensar como un jurista se necesita mucho más que memoria. Capacidad de argumentación, de redacción o comprensión lectora son fundamentales en esta profesión de formación perenne. Conscientes de las cualidades que debe reunir el profesional del futuro, las universidades, centros de negocios y despachos se preparan para abrir las puertas de sus programas estivales a los estudiantes del sector legal.

Un verano de justicia es lo que propone la Universidad Pontificia Comillas Icade, que ha creado una iniciativa pionera en España dirigida a jóvenes de la ESO y Bachillerato. Su objetivo es que exploren los engranajes del sistema democrático para que entiendan cómo funcionan las leyes. No en vano, los alumnos tendrán la oportunidad de ejercer como diputados, de participar en la elaboración de normas o de defender los intereses de los justiciables

Francisco Valiente, director del programa, explica que está dirigido tanto a aquellos estudiantes “que tienen un cierto conocimiento” del ordenamiento jurídico “y quieren convencerse de que les gusta” como a aquellos otros que buscan una actividad para hacer en verano. “Hay mucho desconocimiento del derecho en Bachillerato, pero después es una carrera comodín para muchos alumnos que no saben qué estudiar”. Por eso, con este curso también pretenden informar sobre el grado universitario.

Las actividades se desarrollarán de forma presencial en Madrid del 5 al 9 de julio y los tutores serán los alumnos más “brillantes” de Icade. Aunque no hay unos requisitos generales para optar a becas, Valiente explica que en función del caso concreto pueden ayudar a los interesados. “Apostaría a que en unos años algún político dirá que su primera experiencia fue aquí”, señala.

Elegir carrera

Para ayudar a elegir carrera, Esade ha diseñado un programa en inglés dirigido a mentes inquietas de entre 15 y 18 años que tendrá lugar en Barcelona del 1 al 16 de julio. Además, la institución académica ha desarrollado otros cursos para estudiantes más avanzados que relacionan el mundo del derecho con la política, las relaciones internacionales o la economía.

Elisabet Recio, responsable del programa para preuniversitarios, explica que se adentrará a los participantes en el estudio de los bitcoin y de las criptomonedas, al mismo tiempo que se impartirán clases sobre economía, política o derechos humanos. Todo de forma “distendida, a través de simulaciones”. Y es que, su objetivo es contribuir al “desarrollo de la negociación, de la argumentación” y de la capacidad de hablar en público de los estudiantes.

“Los alumnos que participan tienen muy buenas aptitudes y actitud. Pretendemos saciar su curiosidad”, señala Recio. Esade también concede becas para realizar este programa a los “estudiantes con excelente expediente académico” y bajos recursos económicos. Para optar a las mismas valoran “haber realizado algún tipo de voluntariado”.

Prácticas profesionales

Para aplicar la teoría a la práctica, la firma DLA Piper ya ha incorporado a sus oficinas a los estudiantes de derecho más aventajados, que durante dos meses podrán aprender del día a día de este despacho centrado en la abogacía internacional de los negocios. Jara Evangelio, responsable de Selección, explica que reclutan a estudiantes “con talento y alta vocación, con sólidos conocimientos jurídicos y un excelente nivel de inglés”.

El proceso de selección “incluye entrevistas personales” en las que valoran la “motivación, la capacidad de expresión y de adaptación al entorno” de los estudiantes, este año cuatro chicas y tres chicos, que proceden de universidades públicas y privadas. “Apostamos por la diversidad en todas sus vertientes ya que creemos que es algo que nos enriquece a todos”, señala.

Formándose de forma presencial porque “la cercanía es muy importante de cara al aprendizaje y potencia la sensación de formar parte de un equipo”, estas promesas del Derecho recibirán como contrapartida “una visión real del ejercicio” profesional en un despacho de referencia. “Nos enorgullece ver cómo muchos de los becarios de verano descubren o reafirman su vocación gracias a estas prácticas”, dice Evangelio.

Jóvenes promesas

Concha Fernández Tejada. Acaba de finalizar el doble grado en Derecho y ADE en la Universidad Carlos III de Madrid y es una de las siete jóvenes egresadas que ha seleccionado DLA Piper para cursar su programa de verano. Para ella, estas prácticas son “muy útiles y enriquecedoras” ya que le dan “visibilidad” y una “ventaja competitiva” frente a otros estudiantes. No en vano, antes de iniciar el máster de acceso a la abogacía ya habrá pasado por los departamentos de derecho inmobiliario y fiscal, donde habrá visto cómo se trasladan a la práctica los conceptos teóricos que ha estudiado durante seis años de carrera. Ávida de conocimiento, por delante tiene la oportunidad de alcanzar el sumun de la formación.

Pablo del Moral. Es otro de los jóvenes que ha seleccionado la firma, donde un altísimo porcentaje de trabajo se realiza en inglés. Doble graduado en Derecho y ADE por la Universidad de Valladolid, este programa es una oportunidad de crecimiento profesional para él ya que durante la carrera echó en falta una formación “más práctica”. Con ganas de aprender, destaca que en el despacho “no hay barreras jerárquicas” a la hora de trabajar, de forma que puede nutrirse tanto de un socio como de un abogado júnior. “No sabía que me iban a involucrar en temas importantes” desde el principio, confiesa ilusionado. Ahora, desde el área de derecho mercantil del despacho, podrá empaparse del marco jurídico que rodea a las empresas.

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