Ir al contenido
_
_
_
_
CONTENIDO PATROCINADO
Contenido patrocinado por una marca

La IA generativa y la nube impulsan la transformación sostenible de las empresas

Capgemini orienta sus soluciones tecnológicas hacia la innovación verde y la eficiencia operativa para ayudar a las empresas a reducir su huella medioambiental y ser más resilientes

Manuel Cid, vicepresidente de Insights & Data de la consultora Capgemini en España.

“El optimismo empresarial de cara al recién arrancado 2025 está impulsando grandes decisiones de inversión tecnológica”, mantiene Manuel Cid, vicepresidente de Insights & Data de la consultora Capgemini en España, para quien dicha confianza está directamente ligada al papel de la tecnología en la resiliencia de los negocios, puesto que “desempeña un papel clave en la mejora de la competitividad y la productividad, al tiempo que reduce los costes y mejora la eficiencia”.

Para Cid, tecnologías avanzadas como la inteligencia artificial (IA), la IA generativa o la ciberseguridad están redefiniendo las operaciones y aportando soluciones a las empresas para sortear la incertidumbre del entorno. “En otras palabras: ha pasado de ser una palanca de crecimiento a convertirse en un factor de continuidad del negocio”.

De hecho, una de las áreas que más inversión está recibiendo es precisamente la IA generativa; aunque su adopción masiva también supone importantes retos ambientales. Y por eso, Cid subraya que la sostenibilidad es una prioridad estratégica para su compañía: “Comenzamos a implementar nuestros propios planes hace más de 15 años. Desde 2020, nos hemos comprometido a convertirnos en un negocio de cero emisiones netas”.

La firma, que en su día fue pionera en establecer objetivos de sostenibilidad basados en la ciencia, está centrada actualmente en ayudar a sus clientes a reducir su huella de carbono a través de soluciones tecnológicas.

La nube: innovación en banca y seguros

El interés por la IA generativa y su evolución hacia los agentes de IA ha crecido exponencialmente en los últimos años. En palabras de Cid, “más de la mitad de los ejecutivos creen que la IA generativa tiene el potencial de cambiar la estrategia empresarial y el 80% de las organizaciones ha aumentado su inversión en esta tecnología en los últimos dos años”.

Este crecimiento responde a su capacidad para automatizar procesos, aunque también a su potencial para generar nuevos modelos de negocio en sectores clave, como la banca y los seguros. “Las entidades financieras y las compañías aseguradoras están aprovechando la nube para lanzar nuevos productos, actualizar los ya existentes y optimizar la competitividad”. La nube “permite a estas empresas acceder a recursos sin necesidad de grandes inversiones en infraestructuras físicas, lo que facilita la transformación digital”, añade.

Otra de las prioridades de inversión para 2025 es la transformación de las cadenas de suministro, que se están digitalizando gracias a tecnologías como la IA, internet de las cosas (IoT por sus siglas en inglés) y el blockchain. “Las cadenas de suministro de nueva generación integrarán IA e IoT para mejorar la eficiencia, reducir los residuos y respaldar los objetivos de sostenibilidad de las empresas”. Si bien, permitirán además “una mejor toma de decisiones y mayor rentabilidad”.

No en vano, estas tecnologías están facilitando que las cadenas de suministro sean más resilientes y ágiles, mejorando su capacidad predictiva para anticipar cambios en el mercado y gestionar riesgos.

Inteligencia artificial.

Modelos de IA más eficientes y verdes

En cuanto a la comparación entre Europa y Estados Unidos, Cid reconoce que las empresas estadounidenses están liderando en inversión tecnológica, aunque destaca, al mismo tiempo, los aprendizajes que pueden aplicar las organizaciones europeas y españolas. “Debemos estar convencidos de los beneficios que puede aportar la tecnología y aprovechar así los datos y el conjunto de técnicas digitales como la IA, el gemelo digital, la nube y el IoT para impulsar la innovación y acelerar la adopción de tecnologías más eficientes”.

Además, Cid insiste en que es crucial fomentar asociaciones estratégicas y mejorar las competencias en áreas clave, como la gestión de la cadena de suministro, la IA/ML (aprendizaje automático) y la robótica.

El impacto ambiental de la IA generativa no pasa desapercibido. Según el vicepresidente de Insights & Data de Capgemini, “a medida que las empresas intentan seguir el ritmo de sus competidores, el rendimiento, la escalabilidad y el coste de los proyectos se convierten en factores clave; mientras que la sostenibilidad ha quedado relegada a un segundo plano. Solo una quinta parte de los ejecutivos considera la huella medioambiental de la IA generativa como uno de los cinco factores principales a la hora de seleccionar modelos”.

Precisamente para contrarrestar este fenómeno, Capgemini está desarrollando modelos más ligeros y específicos que reducen la huella de carbono sin comprometer la eficacia. “Investigamos la adopción de modelos más ligeros y especializados para tareas concretas, lo que nos permite ser más eficientes energéticamente hablando”.

Medición del impacto: un reto pendiente

Superar la falta de transparencia en la medición del impacto ambiental de la IA generativa es otro reto que enfrenta el sector. En España, solo el 10% de las empresas mide esta huella debido a la escasa información proporcionada por los proveedores. Por eso, Manuel Cid afirma que Capgemini está implementando herramientas para facilitar esta medición y fomentar prácticas responsables. “Nuestro enfoque de tecnología sostenible guía a los clientes en su transición hacia el cero neto, con etapas de compromiso, actuación y monitorización”.

Y ya de cara a la próxima década, Cid anticipa que la relación entre innovación tecnológica y sostenibilidad evolucionará significativamente. “La investigación y el seguimiento continuos serán esenciales para mitigar el impacto medioambiental de la IA generativa”. Adicionalmente, destaca el papel crucial de los agentes de IA en optimizar el uso de recursos y apoyar la transición hacia energías limpias.

“Su innegable capacidad para analizar datos y tomar decisiones autónomas permitirá a las organizaciones reducir su huella de carbono y mejorar la eficiencia energética”. Un enfoque que sitúa a Capgemini como un socio clave para ayudar a las compañías que busquen cómo abordar los desafíos tecnológicos y medioambientales del futuro.

La adopción de un enfoque colaborativo entre sectores resulta crucial para garantizar la sostenibilidad a largo plazo. Y Cid destaca que serán esenciales “modelos de gobernanza multidisciplinares y la colaboración entre las partes interesadas, como proveedores tecnológicos, clientes y entidades reguladoras, para un uso seguro, sostenible y ético de la IA”. Una contribución que permitirá una reducción más eficaz del impacto ambiental, al tiempo que posibilita el desarrollo de tecnologías adaptadas a las necesidades reales de cada sector, promoviendo la innovación continua.

Objetivo 2030: impulsar la sostenibilidad de sus clientes

Como parte de su compromiso con la sostenibilidad empresarial, la firma ha establecido una meta ambiciosa: ayudar a sus clientes a reducir 10 millones de toneladas de CO₂ antes del año 2030. Esta iniciativa forma parte de un enfoque integral de tecnología sostenible, que, además de minimizar la huella de carbono, pretende optimizar la eficiencia operativa y mejorar el comportamiento medioambiental de las organizaciones. Este proceso, explica Manuel Cid, vicepresidente y responsable de Insights & Data en Capgemini España, está dividido en tres etapas estratégicas: compromiso, actuación y monitorización. “Guiamos a nuestros clientes a lo largo de un viaje completo hacia el cero neto, identificando puntos críticos de mejora y aplicando tecnologías específicas para reducir emisiones”.

Por supuesto, en este enfoque, tecnologías como la IA generativa desempeñan un papel clave, ya que contribuyen a reducir el impacto medioambiental, además de ayudar a transformar procesos industriales para hacerlos más sostenibles. “Desarrollamos modelos de IA más ligeros y específicos para tareas concretas, lo que permite ahorrar energía sin sacrificar la eficiencia”, detalla. Asimismo, el análisis y la toma de decisiones automatizada permiten a las empresas optimizar la gestión de sus recursos, reduciendo tanto estos como las emisiones en toda la cadena de suministro. Capgemini busca, con estas iniciativas, seguir siendo un referente en la transición hacia una economía global más sostenible.

 

Archivado En

_
_