UGT volverá a la negociación del convenio de Inditex, Mango y H&M tras abandonar la mesa en enero
El sindicato asistirá a la reunión del 1 de octubre, mientras aguarda la decisión del Supremo en su conflicto con Fetico
La guerra sindical que se libra en la negociación del primer convenio estatal del comercio textil encuentra una primera tregua. UGT, que abandonó la mesa de negociación el pasado mes de enero al no considerar legítima la presencia en...
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La guerra sindical que se libra en la negociación del primer convenio estatal del comercio textil encuentra una primera tregua. UGT, que abandonó la mesa de negociación el pasado mes de enero al no considerar legítima la presencia en la misma de Fetico, ha decidido volver a ella en la cita del próximo 1 de octubre, fecha en la que la patronal ARTE y los sindicatos tienen agendada la siguiente reunión.
Según ha podido saber este periódico, y confirman fuentes de UGT y ARTE, la decisión se ha tomado después de un acercamiento producido en las últimas semanas entre ambas partes, con el objetivo de centrar el foco en la compleja negociación del convenio. Este, impulsado por grandes operadores del sector como Inditex, Mango, H&M, Primark o Tendam, tiene el objetivo de unificar en un solo documento los 52 convenios provinciales por los que esta actividad se rige en la actualidad.
UGT es, con cinco representantes, el segundo sindicato con mayor representación en la mesa, solo superado por CC OO, que cuenta con ocho. Su retorno, al igual que su ausencia en los últimos nueve meses, llega como consecuencia del litigio que mantiene abierto con Fetico, después de que la Audiencia Nacional diese la razón a este último y confirmarse que su presencia en la mesa se ajusta a la legalidad.
La sentencia, pronunciada en julio, ha sido recurrida por UGT ante el Tribunal Supremo. El tiempo que puede llegar a pasar hasta que el Alto Tribunal tome su decisión, que se estima en más de un año, es un argumento que el sindicato ha contemplado para retornar a la negociación y participar en ella para, según las fuentes consultadas, poder alcanzar un acuerdo de “mínimos”.
Desde la patronal se valora el retorno de UGT: “ARTE celebra que UGT se reincorpore a la mesa de negociación del convenio colectivo nacional del sector de grandes cadenas del comercio textil y del calzado. La asociación siempre se ha mostrado abierta a contar con todos los sindicatos mayoritarios del país para trabajar de forma conjunta en la construcción del primer convenio nacional”.
Origen
El conflicto tiene su origen en el verano de 2023, cuando se constituyó la mesa negociadora del convenio, y que en un primer momento excluyó a Fetico, que interpuso una demanda de conflicto colectivo. Sin embargo, un acuerdo firmado en octubre por ARTE, CC OO y la propia UGT con Fetico permitió la presencia de este sindicato, que retiró la demanda.
Lejos de calmar las aguas, este fue el inicio de la batalla judicial. En la última reunión antes de las pasadas Navidades, UGT reiteró que no consideraba a Fetico un agente legítimo en la negociación, al entender que no alcanza el 10% mínimo de representatividad para continuar en las conversaciones. En concreto, porque C&A, una de las empresas donde Fetico tiene mayor representatividad, ya está cubierta por el convenio de grandes almacenes.
Finalmente, UGT se levantó de la mesa en enero y se ha mantenido fuera de la negociación desde entonces. La misma ha avanzado de forma tímida desde entonces. Las partes negocian sobre una base de convenio compuesta por cinco grupos profesionales, aunque la última reunión, mantenida el 23 de julio, siguió poniendo de manifiesto las distancias entre ellas.
Los sindicatos reiteran que, en materia de clasificación, el convenio no categorice a los responsables de tienda en función del tamaño de la misma, como propone ARTE. Esta también plantea una categoría de entrada en el que el profesional se mantendrá durante 18 meses hasta escalar a la siguiente, un periodo “totalmente desproporcionado”, según CC OO. Las distancias también afectan a la contratación de fijos discontinuos o a los contratos a tiempo parcial.
Desde la parte sindical se insiste en que la lentitud de la negociación es normal, dada la dificultad para armar un primer convenio estatal de estas características.