Microsoft se vale de la IA para mejorar sus resultados en un 18%
El gigante informático cierra con una facturación de 62.000 millones de dólares el trimestre entre octubre y diciembre
El grupo informático estadounidense Microsoft publicó este martes resultados mejores a lo esperado para el cuarto trimestre, impulsados por la informática a distancia (cloud) y con su mayor crecimiento en ingresos desde 2022. Este sector concreto de la nube, estimulado por la explosión de la inteligencia artificial (IA) generativa, explica en buena medida una facturación de 62.000 millones de dólares entre octubre y diciembre, el segundo trimestre del ejercicio fiscal de la firma.
Se trata de un incremento de 18% en la comparación interanual que ubica los ingresos por encima de los 61.100 millones esperados por los analistas, según informa AFP.
En cuanto a las ganancias, Microsoft sumó 44.161 millones de dólares (40.718 millones de euros) en los seis meses comprendidos entre julio y diciembre, un 30% más interanual, mientras su negocio en la nube, el más rentable, siguió creciendo.
La empresa creada por Bill Gates y dirigida por Satya Nadella, indicó en un comunicado que su facturación acumulada en el último semestre fiscal -no sigue el calendario natural- ascendió a 118.537 millones de dólares, un 15% más con respecto al mismo tramo del año pasado.
Por áreas de negocio, la mayor parte de los ingresos correspondieron a la nube inteligente (50.139 millones) y a los productos para empresas y para la mejora de la productividad (37.841 millones), aunque también subió el segmento de computación personal (30.557 millones), recoge Efe. En cuanto a la comparativa anual, se anotaron mejoras del 20%, 13% y 19%, aunque en el último segmento se incorpora la compra de Activision, cerrada el pasado 13 de octubre y que, a su vez, hace que mejore el apartado dedicado a Xbox en un 61% respecto al año anterior.
Otras grandes líneas de negocio como Linkedin mejoraron sus ingresos totales a diciembre del año pasado en un 9%.
“Hemos pasado de hablar de IA a aplicarla a gran escala”, afirmó Satya Nadella, presidente y consejero delegado de Microsoft. “Al infundir IA en cada capa de nuestro conjunto tecnológico, estamos ganando nuevos clientes y ayudando a impulsar nuevos beneficios y ganancias de productividad en todos los sectores”, añadió, según se recoge en la nota de prensa.
“La sólida ejecución por parte de nuestros equipos de ventas y socios impulsó los ingresos de Microsoft Cloud hasta los 33.700 millones de dólares, un 24% más de un año a otro”, especificó a su vez Amy Hood, vicepresidenta ejecutiva y directora financiera de Microsoft.
El consejero delegado Satya Nadella ha prometido convertir a Microsoft en una potencia de la inteligencia artificial asociándose con la startup líder OpenAI. Estos esfuerzos recibieron un impulso durante el trimestre gracias al lanzamiento del software Office para empresas basado en IA.
Los servicios en la nube que permiten a los clientes corporativos crear sus propias aplicaciones de IA sobre la tecnología de OpenAI también impulsaron la demanda de Azure. Aun así, algunos inversores podrían haber estado esperando un mayor salto en la división de nube, dado todo el entusiasmo por las nuevas herramientas y el enfoque de Microsoft en impulsarlas a los clientes. Las acciones cayeron alrededor de un 1% en las negociaciones posteriores a conocerse los resultados.
“En el ámbito del software, todo el mundo está tratando de ponerse al día con Microsoft”, dijo Dan Morgan, gestor de carteras de Synovus Trust Co. “El centro de datos en la nube es el espacio más caliente para la IA y el único lugar donde podemos ver un repunte real en términos de IA. Pero no es suficiente para compensar las tendencias seculares: no hemos vuelto a un crecimiento del 50 o 60% en Azure””, añade, según recoge Bloomberg.
Las acciones de Microsoft cayeron a 401,50 dólares durante la jornada y cerraron a 408,59 dólares en Nueva York. Las acciones habían subido un 19% en los últimos tres meses de 2023, frente a una subida del 11% del índice S&P 500 en lo que parecía una señal de confianza de los mercados en los avances de Microsoft.
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