Los bonistas de Codere relevan a la cúpula e inyectan 100 millones más ante el riesgo de insolvencia
El grupo de juego reformula su plan estratégico ante la insuficiente recuperación de su negocio
Codere no sale de la asfixia financiera que, desde hace años, le ha llevado a encadenar sucesivas reestructuraciones y emisiones de deuda para poder hacer frente a sus obligaciones con los acreedores. Una política que acabó con el grupo de juego en manos de sus bonistas, algo que no ha evitado un nuevo agujero en su balance.
La compañía ha aprobado este miércoles una nueva reestructuración, consistente en una emisión de 100 millones de deuda, que será cubierta por los bonistas que la controlan; un aplazamiento de las emisiones existentes; y un relevo inmediato en su cúpula ejecutiva, así como una reformulación de su plan de negocio.
El primer punto es el más urgente. La propia empresa reconoce en la documentación publicada este miércoles que, sin esa nueva liquidez, “las disponibilidades de tesorería en el segundo semestre de 2023 no serían suficientes para hacer frente a las inversiones imprescindibles para la continuidad del negocio y al pago de los intereses de la deuda”. Por ello, vincula la viabilidad al aplazamiento de la deuda y los intereses, como a este dinero nuevo. “La reestructuración de 2023 hará posible la viabilidad del grupo, y por ende, asegurará su capacidad de hacer frente a sus obligaciones”.
Esta consiste, por un lado, en la emisión de nueva deuda por 100 millones, a un 11% de interés y vencimiento en junio de 2027. Además, aplaza un año, también hasta 2027, el vencimiento de los bonos super sénior y sénior, que a septiembre de 2022 representaban casi el 60% de la deuda bruta total del grupo, con 732 millones. Esos aplazamientos van acompañadas con el correspondiente encarecimiento de los intereses.
“El desempeño financiero de Codere ha mejorado desde que se relajaron las restricciones del Covid-19. Sin embargo, a pesar del alentador crecimiento de las ventas, Codere sigue afrontando vientos en contra y presiones en su liquidez”, explica en una nota. Por ello, añade, lanza una “profunda revisión estratégica de sus operaciones y estructura de capital”, incluyendo la contratación de consultores para revisar su estrategia.
En ella no participarán sus dos consejeros delegados, Alberto González del Solar y Alejandro Rodino, que saldrán del grupo este 31 de marzo. Estos tomaron posesión efectiva el 1 de julio del año pasado, por lo que su paso es fugaz. Les sustituirá un CEO interino, Emilio Zaffignani, con experiencia en General Electric, Dow Chemical y Diversey. Espera contratar uno definitivo a principios de verano. La empresa busca un ejecutivo con experiencia en reestructuraciones y perfil internacional.
Bajo el nuevo plan de negocio, Codere no espera recuperar los ingresos previos a la pandemia hasta 2027. En ese año, el ebitda ajustado de su negocio físico llegará a 225 millones, todavía por debajo de 2019. España, Argentina y México serán las bases del negocio.
La empresa apunta a un plan de recorte de costes. Esta señala que en 2022, sus gastos operativos llegarn a 556 millones, de los que un 44% correspondieron a la plantilla. “La compañía se enfocará en racionalizar sus costes para ser más competitiva, y una de las grandes prioridades del nuevo equipo de gestión será introducir un foco disciplinado en la asignación de costes y capital”, dice en una presentación enviada a analistas. La compañía dice que que buscará “eficiencias” a nivel de sus oficinas centrales, pero asegura en la documentación de su plan que este “ofrece una perspectiva razonable de evitar el concurso y asegurar la viabilidad de las sociedades en el corto y medio plazo y de mantener el empleo”. Tampoco tiene prevista “la ejecución de ninguna medida operativa que afecte a la plantilla”.
En el caso español, apunta a una estrategia de crecimiento centrada en adquirir operadores “pequeños y medianos” de máquinas de juego.
No fue hasta el tercer trimestre de 2022 cuando Codere logró por primera vez ingresos trimestrales pre-Covid. Sin embargo, acumulaba unas pérdidas de 114 millones en los nueve primeros meses del año, la mitad que en 2021.
Sigue toda la información de Cinco Días en Facebook, Twitter y Linkedin, o en nuestra newsletter Agenda de Cinco Días