El fondo de inversión de la Iglesia mormona, investigado en EE UU, según WSJ
Se centra en la posible violación de normas que obligan a los gestores de este tipo de fondos a informar regularmente de los activos en su poder
Las autoridades bursátiles estadounidenses están investigando los esfuerzos de la Iglesia mormona para mantener en secreto durante años su enorme brazo de inversión, una práctica que abandonó después de que en 2019 un antiguo empleado desvelara que el fondo había acumulado 100.000 millones de dólares en activos, informó este viernes The Wall Street Journal (WSJ).
La investigación, que no ha sido confirmada públicamente por la Comisión de Bolsa y Valores (SEC, en inglés), está en una fase avanzada y probablemente se resolverá con un acuerdo en los próximos meses, según fuentes anónimas del diario económico. El caso, apunta el WSJ, se centra en la posible violación de normas que obligan a los gestores de este tipo de fondos a informar regularmente de los activos en su poder, y los incumplimientos se castigan habitualmente con multas.
La entidad en el centro de esta investigación es Ensign Peak Advisors, una firma de inversiones propiedad de la Iglesia mormona y que siempre ha estado envuelta en cierto secretismo. Según el WSJ, Ensign Peak ha venido ofreciendo esa información requerida por las autoridades bursátiles desde febrero de 2020, después de que en 2019 un exempleado presentara una denuncia ante la agencia tributaria estadounidense asegurando que este fondo no debería ser tratado como una entidad sin ánimo de lucro y, por tanto, estar exento de impuestos federales.
En ese proceso fue cuando salió a la luz que, por aquel entonces, el fondo controlaba unos 100.000 millones de dólares en activos, un tamaño equivalente al de algunos grandes fondos soberanos. En una entrevista publicada entonces, el máximo responsable de Ensign Peak admitió entonces que se había buscado cierto anonimato dado que los líderes de la Iglesia temían que los fieles dejaran de hacer donaciones si se conocía la cantidad de dinero que se había acumulado.
Bajo las normas estadounidenses, Ensign Peak está obligado a dar cuenta públicamente de ciertas inversiones -que el pasado 30 de septiembre alcanzaban unos 40.000 millones de dólares-, pero no tiene por qué informar del resto de su cartera, por lo que su tamaño total se desconoce en la actualidad.