Los bancos españoles todavía cotizan en Bolsa a la mitad de su valor en libros
Santander, BBVA y Unicaja, los que más pierden pulso para cerrar el ‘gap’ Bankinter, el único que cotiza por encima del valor contable
La banca española cotiza en Bolsa a la mitad de su valor en libros. Ni las subidas de tipos ni el aumento de los ingresos, los beneficios y la rentabilidad que ha experimentado el sector en los últimos trimestres han servido para que los bancos recuperen en el mercado el valor que reflejan sus activos en los balances.
En ese sentido, Santander, BBVA y Unicaja han sido los bancos que más han perdido pulso. Y es que, aunque a medida que fue cesando el impacto por pandemia del Covid-19 los bancos cotizados venían recortando la diferencia entre su valor contable y la cotización, durante el último trimestre en estas tres entidades se ha ampliado el gap.
Así, a cierre de junio de este año, Santander contaba con un valor en Bolsa de 45.142 millones de euros, lo que supone un 53% por debajo del valor contable, calculado como los activos totales menos los pasivos. Se da la circunstancia de que la diferencia ha aumentado entre los meses de abril y junio. A cierre de 2021 el descuento con el que cotizaban las acciones era del 47,5% y al final del primer trimestre del año del 44,5%. En los dos últimos años, la menor diferencia se registró en junio de 2021, cuando los títulos de la entidad cotizaban un 41,7% por debajo de su valor contable.
En el caso de BBVA la pérdida de pulso ha sido mayor en el segundo trimestre del año. El banco liderado por Carlos Torres cerró junio con una capitalización en Bolsa de 27.660 millones, lo que supone un 43,3% menos del valor de sus activos. La entidad se ha visto perjudicada en la cotización por la coyuntura económica en Turquía que le ha llevado a contabilizar el negocio en el país como hiperinflacionario. Y es que a cierre del ejercicio 2021 las acciones del banco están solo un 28,2% por debajo de su valor contable y a cierre del primer trimestre el descuento era del 28%.
Por su parte, Unicaja es el banco que más lejos se encuentra de recuperar en el mercado su valor contable. A cierre del segundo trimestre, la capitalización bursátil de la entidad andaluza era de 2.476 millones, un 61% menos que su valor en libros. Ni siquiera su fusión con Liberbank le ha permitido reducir el gap. En junio de 2021, justo antes de culminar la absorción, el descuento en Bolsa era del 65%.
Incertidumbre en el sector
De forma teórica, si la diferencia entre el valor en libros y el valor contable se sitúa por encima de 1, quiere decir que la acción cotiza cara porque el mercado valora al banco por encima de lo que este dice que vale en sus cuentas. Por el contrario, cuando la diferencia está por debajo, las acciones cotizan a un precio barato, ya que el mercado estima que el valor de los títulos inferior de lo que el banco dice que vale.
Sabadell, aunque ha logrado más que duplicar su capitalización en los dos últimos años, aún cotizaba un 67,2% por debajo de su valor en libros a cierre del segundo trimestre. La llegada de César González-Bueno como consejero delegado del banco en marzo de 2021 y la posterior reorganización del negocio revitalizó la generación de resultados. De hecho, en 2021 Sabadell fue la entidad del Ibex que más se revalorizó con el 67%, pero aún sigue muy lejos de cerrar la diferencia entre su valor contable y en Bolsa.
De los grandes bancos, CaixaBank es el que se encuentra más cerca de cerrar la diferencia entre su valor en Bolsa y su valor en libros. La absorción de Bankia, culminada en marzo de 2021, supuso crear la mayor entidad del mercado español y desde entonces la capitalización se ha recuperado hasta alcanzar un valor de 26.078 millones, lo que supone un descuento del 25%.
Por el lado contrario, el único banco cuyas acciones en Bolsa cotizan por encima de su valor en libros en Bankinter. La entidad liderada por María Dolores cerró el segundo trimestre con una capitalización de 5.345 millones, lo que supone un 11% más que su valor contable. El banco, centrado en un modelo de negocio muy particular, se ha desmarcado del resto de la banca y el valor de sus acciones se ha mantenido parejo al de sus activos. De hecho, durante los últimos años en los que los tipos de interés estaban en negativo era el único banco en lograr rentabilidades por encima del coste del capital.
En el último lustro, la incertidumbre que se sobrevolaba el sector bancario debido a su escasa rentabilidad por la dificultad que encontraban las entidades para lograr ingresos ante el entorno de bajos tipos de interés llevó las cotizaciones a la baja. A ello se sumó la pandemia del Covid-19, que obligó a dotar provisiones milmillonarias y cancelar los dividendos y las recompras, lo que dejó a los inversores con pocos estímulos para comprar acciones de los bancos.
Así, en conjunto, y excluyendo a Bankinter, los bancos cotizados españoles tenían a cierre del segundo trimestre un valor en Bolsa que de media era la mitad de su valor en libros (-50,2%). A pesar de las subidas de tipos que ha venido aplicando el Banco Central Europeo para hacer frente a la inflación desbocada en la Unión Europea, las valoraciones en Bolsa de los bancos no reflejan las expectativas de los mayores ingresos que obtendrán las entidades.