El empleo en EE UU inyecta un balón de oxígeno a las Bolsas
La creación de puestos de trabajo se ralentiza pero aún es elevada. El Ibex avanza un 1,6% el viernes y pone punto y final a su peor racha bajista
Septiembre ya está aquí tras un verano que tal y como se esperaba, poco ha tenido de tranquilo para los mercados de renta variable y deuda. En el mes de agosto la Bolsa europea registró pérdidas cercanas al 5% y la renta fija se vio presionada por los mensajes lanzados por el Banco Central Europeo (BCE) y la Reserva Federal en Jackson Hole, reconociendo que las subidas de tipos necesarias para frenar la inflación traerán dolor a las economías y dejarán un nivel elevado del precio del dinero durante un tiempo. Los inversores se mantienen ahora expectantes ante las próximas reuniones del BCE y la Fed.
La semana se cierra con nuevas caídas en las Bolsas a pesar de la fuerte remontada registrada el viernes. El mercado laboral estadounidense creó 315.000 empleos en agosto, en línea con las estimaciones del consenso de analistas, lo que implica un crecimiento más lento pero aún sólido, frente a los más de 500.000 nuevos empleos que se registraron un mes antes. Por su parte, la tasa de paro se elevó al 3,7%, por encima del 3,5% previo.
La suave ralentización en el crecimiento del empleo en EE UU se suma a otros datos recientes que apuntan a que las presiones sobre los precios podrían estar suavizándose, lo que a su vez podría implicar menores subidas de tipos por parte de la Fed. "El mensaje básico es que el mercado laboral podría estar empezando a enfriarse y la Fed podría no tener que moverse tan agresivamente", apuntó David Page, jefe de investigación macroeconómica de AXA Investment Managers.
Desde eToro, su analista de inversiones Callie Cox matiza que los datos de empleo "no son suficientes para que la Fed vea su trabajo hecho. En el pasado, la Reserva Federal ha considerado el crecimiento salarial del 4% anual como el criterio de una economía sobrecalentada. Ahora mismo, los salarios siguen creciendo cerca del 6%".
Las Bolsas europeas se contagiaron por el optimismo en EE UU, y en la jornada del viernes, el Dax rebotó un 3,3%, mientras que el Euro Stoxx 50 avanzó un 2,5% y el Cac un 2,2%. Unas ganancias que en el caso de la renta variable germana se vieron favorecidas por la expectativa de la reapertura del gasoducto Nordstream 1 –que ha vuelto a paralizarse– y la caída del precio del gas natural.
En la Bolsa española, el Ibex 35 puso fin a su peor racha bajista de la historia y recuperó un 1,6%, insuficiente para borrar un recorte del 8.3% acumulado durante las anteriores 12 jornadas consecutivas de caídas. Las ganancias del viernes estuvieron lideradas por las acereras, castigadas sesiones atrás: Acerinox sumó un 5,4% y ArcelorMittal recuperó un 4,2%. Tras ellas, Fluidra y Repsol recuperaron un 3,9% y un 3,8%.
Fueron pocos los valores que no lograron evitar las caídas y entre ellos sobresalió Solaria, que cedió un 4,6% el viernes, mientras que Acciona Energía se dejó un 3%.
La evolución de las Bolsas en la última jornada de la semana logró mitigar, e incluso borrar, las caídas del balance de las últimas cinco sesiones. En Europa, el mayor recorte fue para el Cac, que cede un 1,7% en la semana, mientras que el Euro Stoxx 50 recorta un 1,6%. Las alzas del viernes permitieron al Dax sumar un 0,6%. En la Bolsa española, el Ibex cierra la semana con una caída del 1,6% y acumula ya tres semanas de caídas continuadas.
En el balance semanal, el sector bancario lideró los avances, con Sabadell sumando un 6,3%, seguido por CaixaBank (5,2%) y Bankinter (4,7%). Frente a ellos, Solaria, Acciona Energía y Naturgy fueron los más castigados, con caídas del 14,8%, del 6,8%, y del 6,1%, respectivamente.
A la espera de que se concreten cómo serán las subidas de tipos en EE UU y la zona euro, los inversores parecen haber elevado la cautela. Según datos de Bank of America, los fondos de renta variable globales registraron salidas de 9.400 millones de dólares en la semana finalizada el pasado 31 de agosto, el cuarto mayor reembolso de todo el año.
Hans-Jörg Naumer, director Global Capital, Markets & Thematic Research de Allianz Global Investors, apunta que desde un punto de vista táctico y cortoplacista, el panorama general sugiere una infraponderación de las acciones por razones de riesgo.
En el mercado de materias primas, el recorte del viernes de los futuros de gas natural del 12% se sumó al descenso prolongado del barril de petróleo. El Brent ha bajado en pocas jornadas de los 105 dólares a los 92,94, penalizado no solo por la amenaza de recesión sino también por los nuevos confinamientos decretados en China.
A su vez, el oro, valor refugio por excelencia, alcanza los 1.700 dólares. El euro, por su parte, se mantiene por debajo de la paridad frente al dólar (0,997 dólares).
En el debate actual de si llegará o no la recesión a la zona euro, Bank of America ha mejorado sus estimaciones de crecimiento en la región este año al 3%. Su escenario base pasa por una recesión técnica entre el cuatro trimestre de este año y el primero de 2023 y el racionamiento del gas en determinados países, como Alemania. "Sin embargo, lo más importante es que pensamos que la crisis de los precios de la energía y la persistente incertidumbre de la oferta pesarán sobre el conjunto de la zona euro, reduciendo la trayectoria de crecimiento hasta bien entrado el año 2024". Creen así que el PIB de la zona euro subirá solo un 0,3% el próximo año. Sobre España, Bank of America estima que evitará la entrada en recesión técnica pero cree que "el shock del precio de la energía y la persistente incertidumbre del suministro pesarán sobre el país, especialmente dada la alta sensibilidad de la economía española a los precios persistentemente altos de la energía". Una situación que impactará en el PIB español hasta bien entrado el año 2024.