México rescinde el contrato de 850 millones de Acciona en el Tren Maya
El Ejecutivo retoma la obra pese a la paralización judicial de mayo Las constructoras se quedan fueran sin causa imputable a su actuación
El consorcio que se adjudicó la construcción del quinto tramo Sur del proyecto mexicano del Tren Maya, formado por Acciona y Grupo México, se ha quedado fuera entre decisiones judiciales y del Gobierno. El contrato de obras ascendía a 17.815 millones de pesos (unos 850 millones de euros) y ya fue paralizado de forma cautelar el pasado abril por un tribunal del estado de Yucatán, ante la denuncia de un grupo de espeleólogos de Playa del Carmen. Se actuaba en plena selva de Quintana Roo sin estar concluida la tramitación de impacto ambiental. El 18 de mayo llegó la suspensión definitiva por orden judicial, pero el Ejecutivo de Andrés Manuel López Obrador no renuncia a su actuación estrella.
El Fondo Nacional de Fomento al Turismo (Fonatur), promotora de la infraestructura, ha confiado este tramo a la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) una vez que se había dictaminado que se trata de un proyecto de interés público y de seguridad nacional.
Desde Acciona se había manifestado plena con fianza en que el contrato seguiría en pie una vez resueltas las disputas por los informes ambientales. Sin embargo, el consorcio constructor lo ve rescindido sin causas imputables a las empresas.
El Gobierno ha desbloqueado el avance del Tren Maya con la expropiación de casi 400.000 metros cuadrados de suelo en las localidades de Tulum y Solidaridad, y la citada orden de seguir adelante desde la Secretaría de Gobernación y la de Seguridad Pública.
Tal y como informó el lunes Fonatur, el presidente mexicano ya había firmado un decreto meses atrás en el que declaraba afines a la seguridad nacional las mayores obras lanzadas en las primeras fases de su mandato. Se trataba de un atajo para acelerar los procesos de revisión técnica y ambiental.
Desarrollo económico
El trazado, en doble vía, tiene una longitud de 60 kilómetros y enlaza Playa del Carmen y la referida Tulum. Su construcción está prevista junto a la autopista Cancún-Tulum, en gran parte en suelo que formaba parte de desarrollos hoteleros.
Fernando Vázquez, portavoz de Fonatur, ha declarado a El País que el titular del Juzgado Primero del Distrito de Yucatán, que ordenó la paralización del quinto tramo Sur, “tiene un criterio jurídico diferente” al del Ejecutivo, al estimar que el decreto de seguridad nacional no ofrece suficiente cobertura para reanudar los trabajos sin la documentación ambiental. Y añade que “la Ley de Seguridad Nacional faculta al titular del poder ejecutivo a impulsar acciones en materia de seguridad nacional y una de esas acciones es, por ejemplo, preservar la democracia fundada en el desarrollo económico del país”. Para la pública Fonatur, el Tren Maya “va a detonar el desarrollo social y económico en el sureste de México”.
Los trabajos de construcción comenzaron en febrero, y el titular del juzgado de Mérida analizó el riesgo de daños irreversibles para el entorno natural y también si la obra había empezado sin las autorizaciones pertinentes. El informe de impacto ambiental fue presentado en mayo a la Secretaría de Medio Ambiente, incluyendo la deforestación de medio millar de hectáreas y distintos impactos en zonas de ríos subterráneos, cavernas y cenotes. El visto bueno fue firmado el pasado 21 de junio, cuatro días después del cierre del trámite de consulta pública.
El Tren Maya, en la península de Yucatán, es la actuación del momento en México, y López Obrador no ha dudado en defenderla pese a las críticas por los daños al medioambiente. En el caso del tramo 5 Sur el Gobierno se ha abierto a compensar cualquier impacto a la naturaleza, anteponiendo el interés económico.
Uno de los mayores proyectos ganados en 2021
Presencia española. Acciona se adjudicó el tramo 5 Sur del Tren Maya en febrero de 2021 junto a Grupo México por 17.815 millones de pesos, lo que entonces equivalía a 713 millones de euros. Otras españolas trabajando en esta línea son FCC o Azvi.
Alcance. El contrato inicial de Acciona incluía estructuras como un viaducto de 7 kilómetros en Playa del Carmen y diversos pasos para la fauna de la zona. El plazo de ejecución era de 31 meses y estaba prevista la generación de más de 3.000 puestos de trabajo solo en ese segmento.
Concesión. El consorcio formado por Acciona y Grupo México iba a ser responsable del mantenimiento y de la conservación de la infraestructura durante los 51 meses posteriores a su puesta en marcha.