El juego online analiza posibles fraudes ante la brusca caída del margen en las apuestas
Baja al 2% desde finales del 2021, cuando la media de los últimos años se situaba en un 5% La DGOJ lo investiga pero aún sin conclusiones
Los principales operadores de juego online investigan posibles irregularidades entre usuarios como una de las causas que expliquen la brusca caída de los márgenes en el segmento de las apuestas, que generan el 40% del dinero jugado por internet en España, y que ha arrastrado a la baja la rentabilidad general del sector.
Un descenso que se inició en el segundo trimestre del año pasado, pero que se acentuó en la segunda mitad de 2021, y que ha tenido continuidad en los tres primeros meses de 2022, según los datos que publica la Dirección General de Ordenación del Juego (DGOJ).
Estos muestran cómo, pese a que las cantidades jugadas crecen respecto a años anteriores, el margen bruto (GGR por sus siglas en inglés), lo que obtienen los operadores una vez descontados los premios, ha bajado de forma notable en las apuestas. En el segundo trimestre de 2021 ya se colocó por debajo del 3,5%. La caída se aceleró en el tercero al 2,4%, y tocó un mínimo histórico del 1,39% en el último. Entonces se jugaron en apuestas online 3.136,7 millones de euros. De ellos, 43,7 fueron a parar a los operadores, un 57% menos que un año antes pese a haberse jugado un 25% más. Sirva como comparación que entre el primer trimestre de 2019 y el primero de 2021 el margen fluctuaba entre una horquilla de entre el 4% y el 7%.
Fenómeno único
En el primer trimestre de 2022 el porcentaje mejoró al 2,13%, pero es el segundo más bajo de la serie histórica. Esta caída ha arrastrado a la rentabilidad del conjunto del juego online, cuyo margen lleva tres trimestres seguidos por debajo del 3%, algo inédito. En el primero de este año, el GGR de 204 millones es un 15% inferior al del mismo periodo del año pasado. El casino, que genera otro 50% del negocio del juego online, sí mantiene estables sus márgenes.
“El fenómeno que se está viendo en España supone una anomalía nunca vista en ningún otro país europeo”, explican fuentes de la patronal del sector, Jdigital, con operadores como Codere, Sportium (Cirsa), Luckia o William Hill entre sus asociados. “El comportamiento del margen, en relación con el gasto de los jugadores, no responde a la lógica normal del mercado. Desde el sector estamos estudiando qué factores pueden estar justificándolo”. Estos van desde efectos derivados del real decreto que restringió la publicidad del juego online a la madrugada, que entró en vigor en el tercer trimestre del año pasado, a la proliferación de páginas sin licencia o los posibles fraudes de jugadores.
“Hay indicios de irregularidades o, al menos, de comportamientos anómalos. Usuarios que juegan más y que ganan mucho más”, explican dichas fuentes sectoriales. En el primer trimestre de este año, el número de cuentas activas era de 1,02 millones, un 9% menos que un año antes.
Consultada por este periódico, la DGOJ, dependiente del Ministerio de Consumo, confirma que estudia “con la máxima atención” este fenómeno, aunque se apunta que es “demasiado pronto” para extraer conclusiones definitivas. Desde el organismo regulador del juego se explica que puede deberse a “múltiples causas”, y no cree que pueda achacarse a los efectos que la entrada en vigor del decreto que limita la publicidad y las promociones haya podido tener.
Las cantidades jugadas alcanzan máximos pese al decreto Garzón
La entrada en vigor del real decreto que restringe la publicidad del juego online, en vigor desde finales de agosto, no ha frenado las cantidades jugadas en España. De hecho, como muestran los datos de la Dirección General de Ordenación del Juego (DGOJ), el sector ha marcado nuevos récords consecutivos en el último trimestre de 2021 y el primero de 2022. Entre enero y marzo de este año, lo jugado alcanzó los 7.413 millones de euros, un 5% más. Las apuestas, donde la regulación puso especial foco, han superado los 3.000 millones de forma consecutiva en esos dos trimestres. Dicha legislación si ha tenido impacto directo en la inversión en publicidad y patrocinios. La primera ha caído un 52% anual, hasta 34,4 millones, y los segundos lo han hecho un 93%.