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Mapfre asume que tendrá que aplicar en Turquía el criterio de economía hiperinflacionaria

BBVA ya comunicó que aplicaría este mismo criterio y supondría un impacto neutro en en el resultado de la filial turca

Antonio Huertas, presidente de Mapfre.
Antonio Huertas, presidente de Mapfre.APIE

Mapfre ya asume que tendrá que aplicar para su negocio en Turquía el criterio de economía hiperinflacionaria. El presidente de la entidad, Antonio Huertas, ha reconocido que la aseguradora tiene “una presencia relevante” y que se verá afectada por la inflación galopante en el país otomano, que se sitúa por encima del 73%. “Si tenemos que contabilizar el negocio como economía hiperinflacionaria seremos uno de los dos grandes perjudicados”, aseguró Huertas, en referencia a BBVA, la otra gran entidad española con un importante negocio en el país.

CNo obstante, el presidente de Mapfre defendió su apuesta por Turquía y aseguró que mantendrá su negocio en el país. “Cuando Mapfre invirtió en el país, era una potencia regional importantísima. Las circunstancias han llevado otra situación, pero tiene mucha oportunidad de mejora cuando pasen las turbulencias. No nos vamos a ir de Turquía”, destacó.

Tras la presentación de resultados del primer trimestre, BBVA ya anunció que podría aplicar ese mismo criterio de economía hiperinflacionaria para el negocio en Turquía a partir del segundo trimestre. Según detalló el presidente de la entidad, Carlos Torres, el primer ejercicio tendría un efecto negativo en el beneficio de la filial turca, pero no tendría impacto en el capital.

Por otro lado, Huertas ha asegurado que espera una resolución del arbitraje que mantiene con CaixaBank por la ruptura del acuerdo en bancaseguros que Mapfre mantenía con Bankia. La aseguradora y el banco anunciaron el fin de su acuerdo el pasado mes de diciembre, de forma que CaixaBank abonaba a Mapfre 570,8 millones de euros (323,7 millones por la compra del 51% de Bankia Vida y 247,1 millones como indemnización por la resolución del contrato de agencia para la distribución de seguros de no vida).

La aseguradora consideró que la valoración global de la operación es inferior a lo que ya estaba acordado con el banco, al pagarse un 110% del valor, cuando estaba pactado un 120% en caso de ruptura, y por ello llevó la disputa a un arbitraje en el que está en juego una cantidad adicional de 52 millones de euros, que se corresponden con ese 10% de los valores de los negocios de vida y no vida, determinados por el experto independiente.

Preguntado sobre si se arrepiente por no haber demandado por el dinero perdido con la salida a Bolsa de Bankia, el presidente de Mapfre explicó que no lo hicieron porque los análisis “nos indicaban que no teníamos apenas posibilidad alguna de tener éxito”.

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