El mercado aprueba el plan de Siemens Gamesa para subir los precios
El resultado del trimestre estará en la banda baja
Siemens Gamesa (SG) subió ayer un 2,99% en Bolsa, al cotizar al cierre de la jornada a 15,86 euros por título y como el tercer mejor aumento en el selectivo Ibex 35. La acción recuperó terreno tras marcar caídas que llegaron a superar el 4%, después de anunciar en la víspera que revisaba todos sus objetivos de negocio en 2022, por la inflación de los costes y los problemas en el lanzamiento comercial de la turbina 5.X.
De hecho, el fabricante de aerogeneradores adelantó parte de los resultados no auditados del segundo trimestre, que cierra al 31 de marzo. Todos en la banda baja de las previsiones, con ventas de unos 2.200 millones, un ebit (beneficio neto de explotación) negativo en 304 millones y una deuda financiera neta de 1.700 millones.
Pero los mensajes lanzados ayer por la dirección del grupo renovable a los analistas le dieron la vuelta a la cotización de la acción, que llegó a conseguir subidas de hasta el 4% durante la jornada.
La inflación de costes empuja a SG a la renegociación de los precios de los contratos ya firmados con clientes y proveedores. Esta fue una de las estrategias trasladadas en la primera hora de ayer por el consejero delegado y la directora financiera del grupo renovable, Jochen Eickholt y Beatriz Puente, respectivamente, en un encuentro telefónico con analistas.
El CEO reconoció que algunos clientes tendrán que repensar sus proyectos eólicos ante la subida de unos precios que cambiarán sus presupuestos, en algunos casos pactados con SG hace cuatro años, el plazo máximo para poner en marcha un parque eólico. En relación con los suministradores, ya está en conversaciones con los productores de acero, entre ellos ArcelorMittal, que entregan esta materia a SG para la construcción de sus turbinas.
En toda la industria
Esta tendencia a la renegociación de precios se extiende por toda la industria, por ejemplo la de automoción, ante la presión que sufren los balances por la escalada de costes energéticos, logísticos y de materias primas.
Eickholt no se da tregua desde que asumió las riendas el pasado 1 de marzo. La semana anterior visitó la planta de SG en Ágreda (Soria) y el centro de control remoto de Pamplona, dentro de una ronda de viajes que le llevó también a la fábrica de palas en Vagos (Portugal) y a la de componentes para eólica marina en Le Havre (Francia), donde recibió a Emmanuel Macron, uno de los candidatos a la presidencia de Francia.
Preguntado sobre las posibles medidas internas para volver a la rentabilidad, tras registrar unas pérdidas de casi 2.000 millones en los últimos 27 meses, Eickholt se ratificó en su intención de no realizar ni despidos ni cierres de instalaciones, para optar por la optimización de procesos y centros.
Pidió tiempo para concretar esta estrategia a nivel interno. Por su parte, Beatriz Puente se congratuló de la venta al grupo escocés SSE de una cartera de eólica terrestre de 3,9 GW en España, Italia, Francia y Grecia por 580 millones. La mitad de esa capacidad se instalará en España.
Puente destacó que el acuerdo con SSE incluye el suministro de parte de las turbinas y de su mantenimiento posterior. El volumen de este pedido queda pendiente de concretar a medio plazo para ayudar a SSE a alcanzar la citada potencia.
En relación con la producción de la turbina terrestre 5.X, Eickholt reconoció que se inició de forma anticipada su producción en serie y luego ha tenido que afrontar reformas en parte de sus componentes. Las reparaciones han provocado retrasos y costes extras que han repercutido en la rentabilidad. El CEO está convencido de la competitividad del equipo cuando culmine su puesta a punto.
Su capacidad unitaria de 6,6 MW, que cubre el consumo anual de electricidad de 5.000 hogares, es la mayor en eólica terrestre. SG ha iniciado la instalación en Suecia de los primeros aerogeneradores de la familia 5.X. Iberdrola ha contratado 14 para un complejo en Burgos que operará en 2023.