La junta de Enagás ratifica a Gonzalo Aizpiri como consejero delegado
Salen cuatro consejeros del PP y Llardén pasa a ser presidente no ejecutivo
La junta general de accionistas de Enagás ha aprobado este jueves la nueva estructura de administración de la compañía, en la que Antonio Llardén continuará como presidente pero dejará, después de 15 años, sus funciones ejecutivas en manos del nuevo consejero delegado, Arturo Gonzalo Aizpiri.
El nuevo CEO, que sustituye en el cargo a Marcelino Oreja, se convertirá en el único consejero ejecutivo de la sociedad, como preveía Enagás en su plan de sucesión de Llardén, que mantendrá las funciones necesarias para garantizar este proceso durante el que será, muy probablemente,
su último mandato.
Antes director de Comunicación, Relaciones Institucionales y Presidencia de Repsol, donde ha trabajado ininterrumpidamente desde hace casi tres décadas, Gonzalo cuenta con una amplia experiencia en el sector público, donde ha asumido responsabilidades relacionadas con el cambio climático y la transición energética.
También ha sido vicepresidente del Club Español de la Energía, presidente del comité español del Consejo Mundial de la Energía y secretario general para la Prevención de la Contaminación y el Cambio Climático del que hoy es el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico.
"Es un perfil muy adecuado en la nueva etapa de Enagás", ha dicho Llardén, que pasa a tener la condición de presidente no ejecutivo tras 15 años en el cargo.
Los accionistas de Enagás han avalado además los nombramientos como consejeros independientes de David Sandalow, María Teresa Costa (que ha dejado su puesto de consejera dominical en REE), Manuel Gabriel González Ramos y Clara García Fernández-Muro, en sustitución de Ignacio Grangel, Antonio Hernández-Mancha, Isabel Tocino y Gonzalo Solana, cuyo mandato vencía este año.