Telefónica y Vodafone refinancian 600 millones de su filial de torres británica
CTIL firma una línea de crédito con SMBC Bank International La empresa afrontó fuertes saneamientos de sus activos en 2021
Cornerstone Telecommunications Infrastructure Limited (CTIL), filial de torres de telecos de Telefónica y Vantage Towers (Vodafone) en Reino Unido, cerró hace pocas semanas una operación de calado la refinanciación de su deuda. La compañía firmó en enero un acuerdo para una línea de crédito revolving por un importe de 500 millones de libras (unos 590 millones de euros) con SMBC Bank International, antiguo Sumitomo Bank, que actuó como agente para otras entidades.
El propósito del acuerdo se centra en la financiación o refinanciación de los costes de transacción, impuestos, comisiones u otros gastos asociados con la financiación, según explica en su informe financiero anual. De igual forma CTIL buscaba repagar un préstamo interno de los accionistas, de 460 millones de libras, firmado en enero de 2021.
Además, la empresa de torres, que compite con grupos como Cellnex en el mercado británico, señaló que la línea de crédito se dirige a la financiación de propósitos corporativos generales así como de los requerimientos de capital del propio negocio. La línea de crédito, con un periodo de cinco años, obliga a la compañía a establecer una serie de covenants y ratio de apalancamiento y de cobertura de intereses.
En el citado informe, CTIL señala que ha estado financiada por sus dos accionistas con distintas líneas de crédito, así como con aportaciones de equity. A principios de 2021, Telefónica y Vodafone avanzaron 305 millones de libras bajo el acuerdo de línea de crédito de los accionistas, con el objetivo de repagar otros préstamos. Los términos de este préstamo eran de Libor más un 1,3%.
CTIL señala que puede continuar sus operaciones gracias a la financiación de los actuales contratos con sus accionistas así como con la contratación con nuevos clientes en un futuro previsible. Sus consejeros señalan que las previsiones de generación de caja hasta finales de marzo de 2023, junto con la financiación disponible, la empresa podrá hacer frente a todas las deudas en este periodo. La compañía había cerrado su ejercicio fiscal de 2021 (en el mes de marzo) con una liquidez de 44 millones de libras, frente a 31 millones del año anterior.
Resultados
Con respecto al ejercicio fiscal, concluido el 31 de marzo de 2021, la empresa registró unas pérdidas antes de impuestos de 264 millones de libras (unos 312 millones de euros), frente a 98 millones del año anterior, como consecuencia del impacto del saneamiento de una serie de activos, por un importe total de 316 millones. Los ingresos bajaron un 11%, hasta 314 millones.
El Ebitda ajustado, no obstante, se situó en 240 millones de libras, un 4% menos. A su vez, el capex se situó en 104 millones, ligeramente inferior a los 105 millones de 2020.
En enero de 2021, Telefónica y Vodafone firmaron un nuevo acuerdo con CTIL para extender sus contratos ocho años más, prorrogables, con otros tres años en caso de que no se renovaran os contratos. El acuerdo, con el que insistían en reforzar sus compromisos con la compañía, incluyó la capitalización de una línea de crédito comprometida con la emisión de 100.000 nuevas acciones.
En términos internos, CTIL otorga un valor neto en libros a sus activos de equipos, planta y red de 912 millones de libras (casi 1.080 millones de euros), incluyendo 152 millones por emplazamientos en construcción. Eso sí, la cifra global es inferior en 219 millones como consecuencia de distintos saneamientos y ajustes en el valor de determinados activos.
A su vez, la empresa valora los arrendamientos con sus clientes en 769 millones de libras, prácticamente en línea con el ejercicio anterior.
Posible venta de los activos
Participación. El capital de CTIL está repartido al 50% entre Telefónica y Vodafone, si bien ha registrado diferentes movimientos en los últimos tiempos. Así, Vodafone transfirió en 2021 su participación a la sociedad alemana Central Tower Holding, controlada por Vantage Tower, que debutó en Bolsa en el mes de marzo del pasado año, y de la que sigue siendo el principal accionista.
Telefónica. Telefónica, a su vez, controla su participación del 50% de CTIL a través de las filiales O2 Cedar y O2 Networks. En este sentido, esta participación está en la lista de los activos que Telefónica podría vender, según distintos analistas, especialmente tras la venta en 2021 de las torres de Telxius a American Tower. Con esta transacción, clave para la reducción de deuda, junto con la fusión de O2 y Virgin Media, Telefónica prácticamente venía a salir del negocio de torres.